2017: Momento de retomar la confianza

8 de Noviembre de 2024

Eduardo Penafiel

2017: Momento de retomar la confianza

EDUARDO

En el 2016 una de las cosas que más se vio afectada fue la confianza, algo que cuesta mucho trabajo ganarse. Todo el año fue puesta a prueba y al parecer, quedó muy lastimada. El reto en el 2017 será regenerarla en todos los frentes posibles.

Este año sobraron las razones para perder la confianza en mandatarios, instituciones, medios, deportistas y demás categorías. Fue un 2016 en el cual no pasaba una semana sin tener que lidiar con una o otra noticia que afectaba directamente a la confianza:

Redes de corrupción de políticos como Duarte, expuestas a un nivel nunca antes visto. Unas Juegos Olímpicos que, entre la actuación de los atletas nacionales y el vergonzoso manejo de los directivos, fueron de pena ajena. Las múltiples noticias acerca del caso Ayotzinapa, desvistiendo a todo el sistema y todas las líneas de comando, desde las altas esferas de la política, pasando por la policía y los militares. Niveles récord de homicidios en estados como Veracruz. Las dos grandes televisoras nacionales registrando pérdidas. La sorpresiva salida de Agustín Carstens y la renuncia del poderoso Luis Videgaray. Hackeos cibernéticos a cargo de otros países creados para manipular elecciones. Un presidente pasivo que con cada semana que pasaba, perdía todavía más credibilidad.

Y la lista sigue y sigue, pero como bien dicen, la esperanza nunca muere. En este 2017 yo espero:

- Que cuando vea a un policía, me sienta seguro caminando por las calles, sabiendo que el está ahí para cuidar y para proteger a ciudadanos como yo.

- Que los gobiernos transparenten sus cuentas cada mes, para saber el destino de cada peso gastado.

- Que los crímenes se denuncien, se juzguen de manera adecuada y se castiguen con todo el rigor de la ley.

- Que se page siempre lo justo por un trabajo, con las prestaciones de ley y que dejemos de regatearle a los trabajadores honestos con los que interactuamos día a día.

- Que los bancos me van a decir exactamente qué me están cobrando y por qué me lo están cobrando.

- Que en las tiendas de conveniencia me den el cambio como debe de ser: completo, sin quedarse con los centavos o hacer como que están redondeando.

- Que en los taxis que pido a través de aplicaciones, los choferes hayan pasado una prueba de manejo y por un proceso de selección adecuado, con revisión de antecedentes y capacidades. También que me den esa botellita de agua que tanto extrañé este año y me sacaba una sonrisa. - Que el camión o microbús va a respetar mi espacio cuando voy en mi bicicleta así como yo respetaré el de él.

- Que cuando esté lleno un basurero, me llevaré esa basura hasta encontrar otro que tenga espacio, antes de aventar algo en la calle.

- Que cuando me equivoque, no importa que tan tarde me de cuenta, pida perdón y aclare las cosas.

Como estos ejemplos, puedo escribir cientos más que invariablemente en algún momento del 2017 nos encontraremos de un lado o del otro, pero lo más importante es lo siguiente:

Que entendamos que no podemos ser una sociedad pasiva pensando que las cosas se van a arreglar por arte de magia. Que nosotros como ciudadanos, tenemos la obligación de fomentar los cambios, de ser más activos y dedicarle tiempo a este tipo de asuntos. Que es nuestra obligación denunciar un delito o exponer un acto de corrupción a través de la cámara de nuestro celular o en redes sociales para que la mayor cantidad de personas lo vea. Que apoyemos a esos grupos civiles que encabezan movimientos para limpiar las calles y mejorar las condiciones de los lugares a través de los cuales circulamos o frecuentamos.

La confianza inspira y es un vehículo importante que lleva a la seguridad. Tenemos que estar consientes que nuestros actos influyen en un ecosistema político y social que hoy no funciona bien, en donde la actitud que tomamos ante distintas situaciones nos afectan a nosotros y a quienes nos rodean.

Para confiar tenemos que exigir y para que confíen en nosotros, tenemos que demostrarlo.

Yo confío en ti, 2017.