Un día después de que decenas de mujeres e integrantes de colectivos y organizaciones feministas salieron a marchar en exigencia de la destitución del fiscal general del Morelos, Uriel Carmona Gándara, el funcionario compareció ante el Congreso estatal y se concentró en tres argumentos: descartó su dimisión, negó que hubiera alguna acusación en su contra, y acusó a las autoridades de la Ciudad de México de haber vulnerado la soberanía del estado.
“Es la primera vez que hay fiscalía autónoma que no obedece al gobernador, que no obedece al Congreso, que no obedece a ninguna autoridad y menos a autoridades de otros estados que han vulnerado la soberanía de nuestro querido Morelos y la soberanía de esta legislatura”, acusó el fiscal general.
Acompañado por el titular de la Comisión Estatal de Seguridad Pública, José Antonio Ortiz Guarneros, así como del secretario de gobierno del estado, Samuel Sotelo Salgado, el fiscal Carmona Gándara compareció en el Pleno del Congreso, por casi seis horas, respecto al trabajo de la institución a su cargo sobre el caso de la joven Ariadna Fernanda López, el cual subrayó fue “impecable”.
Al reprochar que las autoridades de la Ciudad de México, en referencia a la jefa de Gobierno y la Fiscalía capitalina, “juzgaron” sin conocer el trabajo del equipo médico legista de Morelos, conformado por mujeres, —quienes aseguró están certificadas a nivel nacional e internacional—, el fiscal morelense recalcó que el dictamen de necropsia de Ariadna fue “un trabajo limpio” y advirtió que las discrepancias con el dictamen de la FGJ-
CDMX se resolverán en tribunales.
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“No tengo la facultad de señalar si una necropsia es útil o no, una autoridad de otro estado tampoco lo puede hacer legalmente y menos si no la conoce”, apuntó Carmona Gándara al informar a los legisladores estatales que, aunque han compartido con las autoridades capitalinas el dictamen y la carpeta e investigación, también han solicitado los resultados de esa segunda necropsia al cuerpo de Ariadna, pero sostuvo que a la fecha no han recibido respuesta.
Ante los reiterados comentarios de los diputados, como el legislador emecista, Julio César Solís Serrano —quien cuestionó al fiscal si renunciara al cargo tras los señalamientos del presunto encubrimiento del feminicidio—, el fiscal negó categóricamente tener alguna vinculación con el presunto feminicida, y aseveró que ni en el caso de Ariadna u otro ha cometido alguna conducta indebida.
“Yo no voy a renunciar porque la consecuencia de un señalamiento infundado no es renunciar es que se lo acrediten a uno en un ministerio público, en un juzgado penal y la consecuencia no es que uno se vaya del cargo, es que uno se vaya a la cárcel y a eso estamos expuestos. No voy a renunciar, me voy a defender y no me van a acreditar nada, porque yo no hice nada indebido, diputado”.
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