Consolidando el Desarrollo de México: De lo Nacional a lo Regional con el Renacimiento Maya en Yucatán

22 de Noviembre de 2024

Víctor J. López
Víctor J. López
Abogado internacional mexicano, socio fundador de Sánchez-Labrador & López Martínez S.C. (SLLM) y actualmente Representante del Gobierno del Estado de Yucatán en la Ciudad de México. La firma es reconocida en América Latina por su enfoque en innovación, inversión extranjera y emprendimiento. Con una amplia trayectoria en el sector público y privado,Es miembro de la Barra Internacional de Abogados, miembro de la junta directiva de la Asociación de Abogados México-Estados Unidos y del Consejo Mexicano de Asuntos Internacionales.

Consolidando el Desarrollo de México: De lo Nacional a lo Regional con el Renacimiento Maya en Yucatán

victor j. martinez

En el sexenio del presidente López Obrador, México ha consolidado su posición como un referente regional en términos de inversión y desarrollo. La estrategia de AMLO ha sido clara: invertir en infraestructura para impulsar el crecimiento económico, fomentar la inversión y reducir la desigualdad.

En los últimos años, México ha experimentado un aumento notable en la inversión extranjera directa (IED), alcanzando cifras récord año con año. En 2024 la tendencia positiva ha continuado, con el primer trimestre registrando un aumento de 9% respecto al mismo periodo del año anterior. Este nuevo máximo histórico subraya la estabilidad económica y el buen ambiente de negocios en México.

Este escenario ha sido provocado por el enfoque de desarrollo a partir de inversión en infraestructura pública. Impulsado por los proyectos insignia del gobierno, el crecimiento de la inversión física en México ha sido notable durante el sexenio; en términos generales, la inversión pública aumentó un 15.7% y la privada un 18.1%, demostrando el impacto positivo de la sinergia entre ambas.

En este sentido, el país ha apostado fuertemente por proyectos de infraestructura que no solo impulsan la economía, sino que también buscan cerrar brechas sociales y regionales. El Tren Maya y el Corredor Interoceánico son ejemplos de cómo México está construyendo una red de conectividad que facilita el comercio, el turismo y el desarrollo regional.

Con la elección de Claudia Sheinbaum como presidenta, se anticipa la continuidad y profundización de estas políticas. La Dra. Sheinbaum, conocida por su enfoque progresista, ha prometido fortalecer la inversión en infraestructura y seguir impulsando políticas de inclusión social. Su propuesta se centra en la sostenibilidad, la equidad y la innovación, asegurando que los beneficios del crecimiento económico se distribuyan de manera más equitativa entre todos los mexicanos.

Ciertamente motivado por el contexto nacional, Yucatán emerge como un ejemplo destacado de cómo un enfoque integral alineado a este perfil de política de gobierno promete transformar una región. El proyecto “Renacimiento Maya” liderado por el gobernador electo, Joaquín Díaz Mena, encapsula perfectamente esta estrategia de desarrollo. La iniciativa es una propuesta que impulsará el desarrollo económico regional, posicionando a Yucatán como un líder en innovación y desarrollo, no sólo desde la perspectiva de infraestructura y economía, sino que también integra la justicia social y la sostenibilidad ambiental.

Yucatán enfrenta desafíos significativos en términos de desigualdad y pobreza, con una gran parte de la población viviendo en condiciones precarias, especialmente en áreas rurales y en este sentido, el plan del “Renacimiento Maya” que presenta el gobernador electo propone una solución de fondo para atender las causas de dichos problemas; con proyectos como la conexión intermodal entre el Tren Transístmico, el Tren Maya y el Puerto de Progreso, la ampliación de dicho puerto, la creación de un polo de bienestar, un ambicioso plan de seguridad energética y otro de impulso al agro, promete transformar significativamente la realidad socioeconómica de Yucatán, y sobretodo, combatir la deuda histórica en el sur de nuestro país, la reducción de la pobreza y la desigualdad.

En conclusión, México avanza hacia un futuro prometedor con un enfoque decidido en la inversión en infraestructura y desarrollo social. La nación observa con expectativa y optimismo cómo estas iniciativas nacionales y locales transformarán el panorama socioeconómico del país en los próximos años.