La Clínica es Nuestra: fortalecimiento de las políticas públicas ciudadanas

26 de Diciembre de 2024

Judith Senyacen Méndez Méndez

La Clínica es Nuestra: fortalecimiento de las políticas públicas ciudadanas

columna fiscal

La participación de la ciudadanía dentro de las políticas públicas, en específico en la política fiscal, puede darse por medio de la interacción de la sociedad civil organizada con el Legislativo, por ejemplo, con los parlamentos abiertos, en los que se pueden tratar temas de recaudación, de asignación del gasto, entre otros. La participación puede ser formal o informal, periódica o no. El presupuesto participativo es otro ejemplo de participación ciudadana.

En los programas de salud y en la prestación de los servicios, la participación de la comunidad se reconoce en el artículo 57 de la Ley General de Salud (LGS) y tiene como objetivo fortalecer la estructura y el funcionamiento del sistema con la finalidad de mejorar el nivel de servicios que recibe la población. Esta participación puede provenir de la formulación de sugerencias, a través de informar irregularidades a las autoridades, entre otras. Las intervenciones comprenden desde el desarrollo de políticas públicas hasta la evaluación y el monitoreo de las mismas.

En este sentido, en meses pasados se anunció el programa La Clínica es Nuestra que se puso en marcha en las 23 entidades adheridas a los Servicios de Salud del Instituto Mexicano del Seguro Social para el Bienestar (IMSS Bienestar). Este programa está dirigido a la atención de la población sin seguridad social y otorgará subsidios directos a 11 mil 947 unidades de salud del primer nivel de atención para rehabilitación, equipamiento y/o mantenimiento.

Las Reglas de Operación (ROP) fueron publicadas el 4 de abril de 2024. El presupuesto se transfiere a Comités de Salud de cada unidad para ejercer dichos recursos de acuerdo con sus necesidades. El programa LCN se encuentra alineado con el Plan Nacional de Desarrollo 2019-2024 dentro de los rubros de “Construir un país con bienestar” y “Salud para toda la población” y, en particular, con tres objetivos claves: el primero, garantizar los servicios públicos para la población sin seguridad social; el segundo, incrementar la eficiencia, la efectividad y la calidad del Sistema Nacional de Salud (SNS) y, el tercero, incrementar la capacidad de infraestructura.

Para dimensionar el programa y su cobertura, podemos hacer referencia a la capacidad actual de las unidades médicas de primer nivel para la población sin seguridad social. Al mes de abril de este año, la Secretaría de Salud y el IMSS Bienestar reportaron 21 mil 447 establecimientos en este nivel de atención. La cobertura con 11 mil 947 centros de La Clínica es Nuestra sería de 56% de las unidades de primer nivel y va desde 11.3% en Michoacán hasta 79.9% en Guerrero y se destina un total de 3 mil 981.4 mdp, equivalentes a 3.09% del presupuesto del IMSS Bienestar.

La transparencia fiscal y la participación ciudadana pueden contribuir a mejorar la asignación de recursos y la eficiencia del gasto. Sin embargo, para asegurar un buen desempeño y ejecución del presupuesto se requiere contar con mecanismos periódicos de seguimiento, supervisión y ejecución de los recursos, entre otros aspectos que han sido mencionados por la Auditoría Superior de la Federación (ASF) para el programa La Escuela es Nuestra (LEN), el cual opera bajo la misma lógica de transferencias directas a comités en las comunidades.

El Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP) presenta cifras de salud y finanzas públicas que pueden consultarse en https://ciep.mx/.