En el proceso electoral 2023-2024 se registraron tres víctimas de violencia-política en promedio cada día, ubicándolo como el proceso electoral “más violento en la historia moderna” del país.
La firma Integralia Consultores documentó un total de 889 víctimas, lo que implicó un aumento de 132.7% en comparación con las víctimas del proceso electoral de 2017-2018, y un alza de 197.3 por ciento respecto a las registradas en la elección de 2021.
De acuerdo con el “reporte final de violencia política” de la consultora presidida por Luis Carlos Ugalde, exconsejero presidente del Instituto Federal Electoral (hoy INE), durante el pasado proceso electoral fueron asesinados 39 aspirantes o candidatos.
Perfil de las víctimas
Por tipo de agresión, los asesinatos concentraron la mayor cantidad de víctimas con un total de 267; seguidas de las amenazas, con 260; se registraron 218 atentados, 30 desapariciones, 18 secuestros y 96 más se determinaron como “otras” agresiones.
Del balance total de víctimas 365 correspondieron a aspirantes o candidatos; 172 políticos o expolíticos; 149 se trataron de funcionarios o exfuncionarios; sumaron 148 víctimas colaterales, 45 familiares y una decena más de víctimas sin identificar, según el informe.
Flancos débiles
Tres de cada 10 víctimas de la violencia-política durante el proceso se trataron de militantes de Morena, que en total registraron 294 víctimas.
Del PRI sumaron 118 víctimas; el PAN registró 102 víctimas; le siguió MC con 74; PRD, con 64; el PVEM, 45; PT sumó 28; del resto de los partidos fueron 120 víctimas y 44 quedaron sin identificar.
El 74% de las víctimas se trataron de actores políticos municipales; a nivel estatal se contabilizaron 128, equivalentes al 14% del total de víctimas, y 64 víctimas de nivel federal.
Considerando que el 92% de las personas candidatas asesinadas aspiraban a un cargo a nivel municipal, principalmente presidencias, el reporte sostiene que “el crimen organizado sometió a muchos municipios para fortalecer sus redes de impunidad”.
Territorios peligrosos
Guerrero (125), Chiapas (113) y Puebla (87) fueron las entidades que concentraron el 36.5% de las víctimas de violencia-política.
De igual manera Guerrero (56), Chiapas (39) y Michoacán (23) concentraron el 13 por ciento de las víctimas mortales a nivel nacional.
Mientras que la mayoría de las víctimas de agresiones contra candidaturas se focalizaron en Puebla (49), Chiapas (39) y Guerrero (39).
JND