Soledad, peor que el tabaquismo, el alcoholismo y la obesidad
Un equipo de investigación considera que el tema debería abordarse en la práctica clínica cotidiana con adultos mayores
Para una persona, especialmente a partir de la tercera edad, vivir en soledad puede implicar un riesgo de mortalidad comparable al de fumar más de 15 cigarrillos al día. En ese sentido, la falta de compañía es más perjudicial que el alcoholismo, la obesidad y la falta de actividad física.
Según un equipo de investigación que publica hoy un estudio en el Journal of the American Geriatrics Society, “encontramos que la soledad se asoció significativamente con una menor calidad de vida mental… y física”, aunque mencionan que la fortaleza de esta asociación es mayor con respecto a la salud mental.
La principal conclusión de la investigación es que el tema de la soledad se debería abordar en la práctica clínica.
“La soledad tiene influencias en la salud que son bastante significativas y bastante fuertes, de la misma manera que preguntamos a los adultos mayores: ¿fumas? ¿O mides tu nivel de azúcar en sangre? Deberíamos indagar y medir la soledad y ofrecer soluciones”.
En México también es un problema
La investigación se llevó a cabo en Estados Unidos, donde la soledad había comenzado a convertirse en un problema antes de la pandemia de Covid-19, ya que alrededor de 53% de los adultos mayores la experimentaban, y por supuesto la llegada del coronavirus exacerbó el problema.
De acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Salud y Envejecimiento en México (ENASEM) del el INEGI publicada en julio de 2023, el 35.4% de la población de 60 años y más experimentaba sentimientos de soledad en 2018; con la pandemia, el número creció a 39.8% en 2021.
En busca de soluciones
A medida que las personas van envejeciendo, diversas circunstancias (como la jubilación, el divorcio o las muertes de familiares y amigos) provocan grandes cambios en su vida, lo que les dificulta mantener sus relaciones sociales y hacer nuevas.
Si bien admite que la soledad puede ser compleja de identificar y de abordar, Monica Williams-Farrelly, primera autora de la investigación, señala en un comunicado de prensa que “Los adultos mayores necesitan que sus médicos de atención primaria los examinen y les sugieran recursos eficaces que les permitan mantener, fomentar y desarrollar relaciones sociales”.
SIGUE LEYENDO |