¿A quién elegirá Donald Trump como compañero de fórmula para las elecciones presidenciales de noviembre? Imposible saberlo, pero algunos nombres suenan con fuerza.
El expresidente republicano debe elegir con cuidado a su posible futuro vicepresidente si quiere ampliar su base electoral en su duelo contra el demócrata Joe Biden.
Estos son algunos de los nombres que más circulan.
Tim Scott
A Donald Trump le gusta el perfil de Tim Scott, el senador afroestadounidense de Carolina del Sur.
El expresidente republicano no para de elogiar la lealtad de este hombre de 50 años, antiguo aspirante a la Casa Blanca.
“Eres mucho mejor candidato para mí de lo que has sido para ti”, dijo en un mitin reciente.
Con Tim Scott como mano derecha, Trump podría aspirar a ganarse a los votantes negros, que prefirieron mayoritariamente a Joe Biden en las elecciones de 2020.
Sus detractores reprochan al senador su falta de magnetismo, sobre todo durante los debates.
Elise Stefanik
Elise Stefanik, de 39 años, llegó al Congreso con posiciones moderadas, pero su ascenso meteórico entre los republicanos se debe al apoyo de Donald Trump.
La congresista por Nueva York ha abrazado sin vacilar cada una de las cruzadas del millonario.
Si la elige como compañera de fórmula, Donald Trump podría ganarse a una parte del electorado femenino, entre el que su apoyo decae, según los sondeos.
Pero esta incondicional del candidato republicano también podría ahuyentar a los votantes más moderados.
J.D Vance
J.D. Vance, de 39 años, no ha sido fan de Donald Trump desde sus inicios, algo que el expresidente republicano le reprocha.
Pero no por ello hay que borrarlo de la lista.
Este exmilitar y senador por Ohio, conocido por haber publicado un libro éxito de ventas sobre la clase trabajadora blanca de Estados Unidos, acaba de entrar en política pero su perfil ya despierta interés en los círculos republicanos.
Llama la atención sobre todo su capacidad para recaudar grandes sumas de dinero para su partido. Y esto es importante en un país donde las victorias políticas se obtienen a base de miles de millones de dólares.
Marco Rubio
La relación entre Donald Trump y Marco Rubio ha sido tirante en el pasado.
En las primarias republicanas de 2016 el senador de Florida se burló del magnate inmobiliario.
Desde entonces ambos parecen haber enterrado el hacha de guerra.
Donald Trump sabe que podría sacar provecho del perfil de este senador de 52 años, muy implicado en temas geopolíticos y que podría darle un valioso apoyo entre los votantes hispanos.
Pero un sector de la derecha dura nunca le ha perdonado su propuesta de reforma migratoria, presentada hace más de diez años.
Nikki Haley
La elección de Nikki Haley, la última rival de Donald Trump en las primarias republicanas, sería sorprendente, pero no imposible.
Esta mujer de 52 años aún no ha anunciado su apoyo público a la candidatura de Donald Trump.
Durante muchos meses el republicano ha llamado a su exembajadora ante la ONU “cabeza hueca”.
Pero la exgobernadora de Carolina del Sur es muy popular entre los votantes republicanos moderados e independientes, votos que de otro modo podrían ir a parar a Joe Biden.
Otros posibles candidatos
También circulan los nombres del gobernador de Dakota del Norte, Doug Burgum, y del senador Rick Scott, pero sus posibilidades parecen limitadas por el momento.
También lo son las del empresario Vivek Ramaswamy, el congresista Byron Donalds y la expresentadora de televisión Kari Lake.
La gobernadora de Dakota del Sur, Kristi Noem, fue considerada durante mucho tiempo como una posible candidata pero sus posibilidades se han desplomado desde que afirmó haber matado de un disparo a su perra porque era “indomable”.
Contactado por la AFP, el entorno de Donald Trump se negó a dar detalles sobre el perfil que busca.
“Cualquiera que afirme saber quién o cuándo el presidente Trump elegirá a su vicepresidente miente”, dijo uno de sus asesores. “A no ser que esa persona se llame Donald Trump”.