El puente vehicular Nichupté en Cancún genera altas expectativas en Quintana Roo, en donde se prevé contribuya al turismo. A la par, que contribuye con la restauración ambiental de dicha zona del estado.
Con 8.8 kilómetros de longitud, la obra “cumple con todos los requerimientos de Manifestación de Impacto Ambiental (MIA)” que pone como requisito a este tipo de obras la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), destacó la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT).
Al respecto, se detalló que para poner en marcha las labores, todo se basó en “estudios geotécnicos, geofísicos e hidrológicos”.
La dependencia destacó que con el puente Nichupté se lleva a cabo “el programa de restauración ambiental más grande en su historia”.
Se añadió que el proyecto tiene una compensación ambiental de 306 hectáreas por un total de cuatro hectáreas que abarca la construcción de la obra de este puente vehicular Nichupté.
En este sentido, la SICT detalló que se acordó con la Semarnat “la reforestación de hectáreas y la realización de drenajes” para que el mangle removido para la obra se pueda regenerar.
Cabe destacar que este puente contará con tres carriles, uno de ellos reversible. Esto, se prevé, reducirá los tiempos de traslado del aeropuerto de Cancún a la zona hotelera.