Perú amplía cuatro meses la prisión preventiva contra Pedro Castillo

6 de Noviembre de 2024

Perú amplía cuatro meses la prisión preventiva contra Pedro Castillo

gabinete de presidente de Perú

Peruvian presidential candidate Pedro Castillo gestures at supporters from a balcony of his party’s headquarters in Lima on June 7, 2021, after taking a razor-thin lead as the final votes are tallied in a neck-and-neck battle with populist Keiko Fujimori following the runoff election of June 6. - Right-wing populist Keiko Fujimori and hardline leftist Pedro Castillo were neck-and-neck in a battle for Peru’s presidency Monday as the crisis-hit nation’s election looked set to go down to the wire. (Photo by Luka GONZALES / AFP)

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LUKA GONZALES/AFP

Foto: AFP

El tribunal aceptó un recurso de apelación de la fiscalía y extendió el período de reclusión, mientras se determina su eventual llamado a juicio por rebelión, abuso de autoridad y perturbación de la tranquilidad pública

La Corte Suprema de Perú amplió de 14 a 18 meses la orden de prisión preventiva contra el expresidente Pedro Castillo, acusado de varios delitos por su intento fallido de disolver el Congreso en diciembre de 2022, según anunció el poder judicial este jueves.

El tribunal aceptó un recurso de apelación de la fiscalía y extendió el período de reclusión de Castillo, de 54 años, mientras se determina su eventual llamado a juicio por rebelión, abuso de autoridad y perturbación de la tranquilidad pública.

En un auto difundido por el Poder Judicial en X, los magistrados “fijaron en 18 meses el plazo de la prolongación de la prisión preventiva”, con lo que el exmandatario permanecerá detenido hasta diciembre de 2025.

La fiscalía acusa a Castillo de perpetrar un “golpe de Estado” y pide una condena de 34 años de cárcel.

El exmandatario izquierdista fue capturado el 7 de diciembre de 2022, cuando fracasó en su intento de disolver el Congreso y gobernar por decreto.

Desde entonces, está recluido en una cárcel especial para expresidentes en las afueras de Lima.

“Nunca me levanté en armas”, ha alegado Castillo en audiencias ante magistrados indicando que su pedido de disolver el Congreso no se consumó porque sus órdenes no fueron acatadas por las fuerzas armadas.

El expresidente (2021-2022) reiteró su versión de que fue removido del cargo en el marco de una supuesta conspiración política entre el Congreso derechista y la fiscalía, que lo investigaba por presunta corrupción.

El expresidente peruano, quien había sido elegido en 2021 para gobernar hasta 2026, fue destituido cuando llevaba 17 meses en el poder.

Su vicepresidenta, Dina Boluarte, asumió el cargo en medio de manifestaciones que exigían su renuncia, el cierre del Congreso y adelantar las elecciones a 2023.