Los topes aumentan la contaminación y el consumo de combustible
Un estudio destaca que el uso de unidades de última generación, como los vehículos Euro VI en la Línea 7 del Metrobús, puede reducir significativamente la exposición de los pasajeros a partículas contaminantes dentro del vehículo
La presencia de topes en las calles, una medida comúnmente utilizada para regular la velocidad del tráfico, está siendo señalada como una causa del aumento en la contaminación y el consumo de combustible, según investigadores del Instituto de Ciencias de la Atmósfera y Cambio Climático de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Durante tres años, investigadores de la UNAM evaluaron el impacto de los topes y las actualizaciones tecnológicas vehiculares en varias líneas del Metrobús y del Sistema de Transporte Colectivo Metro de la Ciudad de México. Los resultados, publicados en la revista Environmental Pollution, revelan que la presencia de topes aumenta la exposición a contaminantes y el consumo de combustible hasta en un 60% para vehículos pesados y entre un 44% y un 71% en camiones de pasajeros.
El estudio también destaca que el uso de unidades de última generación, como los vehículos Euro VI en la Línea 7 del Metrobús, puede reducir significativamente la exposición de los pasajeros a partículas contaminantes dentro del vehículo.
Aarón Jazcilevich Diamant, uno de los investigadores involucrados en el estudio, enfatizó la importancia de tener una estimación precisa de la inhalación de contaminantes atmosféricos para evaluar los riesgos y diseñar estrategias para controlarlos.
Según el artículo publicado por la Dirección de Comunicación Social, para el estudio se recolectaron muestras de PM2.5 y midieron las concentraciones en tiempo real, dentro de las cabinas de autobuses BRT equipados con estándares de emisiones de diésel Euro IV, V y VI en el Área Metropolitana de la Ciudad de México, desde octubre de 2017 hasta marzo de 2020,
Los resultados, que fueron publicados en la revista científica “Environmental Pollution”, señalan que las concentraciones máximas de PM2.5 en la cabina disminuyeron en 35% de los autobuses Euro IV a Euro V, y en 80% en los Euro VI con motor diésel.
De acuerdo con Jazcilevich Diamant, es necesario saber lo que verdaderamente respira un ciudadano para así desarrollar políticas que permitan aminorar la situación. DJ