Asombro y malestar es lo que han provocado entre los turistas las excavaciones que se hacen en la pirámide de Quetzalcóatl. Y es que a raíz de estos trabajos decenas de piedras han sido apiladas en cinco puntos de la parte alta de la plataforma, lo cual, a parte de impedir sea visitada, quita visibilidad al monumento.
Hasta el momento se han excavado cinco pozos (el más grande de ellos de tres metros de largo, dos de ancho y cuatro de profundidad), de los cuales se han extraído toneladas de rocas.
Pero estos trabajos tienen una razón benéfica para la zona arqueológica. Con ellos, se busca la mayor preservación de la pirámide de la Serpiente Emplumada a través de la construcción de un sistema integral y cubierta del sitio y del propio monumento.
Al respecto, Alejandro Sarabia, arqueólogo al mando de estos trabajos, destacó que en las últimas dos décadas se ha presentado un acelerado deterioro en la pirámide, lo cual alarmó al personal del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH). Por ello fue que se abrió un concurso para recibir propuestas para las labores de restauración que, se tiene previsto concluyan este mismo año.
En septiembre de 2022 se dio a conocer que la empresa Estudios Dos Puntos Arquitectura fue la que presentó el mejor proyecto; así, se le asignó el trabajo que inició hace unos días en conjunto con la Coordinación Nacional de Arqueología.
Al respecto, debe destacarse que el INA recibió 113 propuestas de México y otros tres países: Brasil, Italia y Japón.
Sobre el material del cual estará conformada la membrana plástica que se pondrá, el arqueólogo Alejandro Sarabia detalló que se conforma de un material que permitirá que la suciedad que se junte resbale con la primera lluvia que le caiga. Dicho material tiene una durabilidad de 30 años como mínimo, añadió.
Ahora ya lo sabes, si vas a Teotihuacán y ves los trabajos en la pirámide de Quetzalcóatl tómalo con calma y piensa que se trata de algo necesario para seguir disfrutando por mucho tiempo más de estos atractivos arqueológicos. GA