Entre enero de 2019 y mediados de este 2024 se registraron dos mil 129 agresiones en contra de elementos del Ejército, Marina y Guardia Nacional, lo que representa un ataque cada día en promedio en contra de las fuerzas federales.
De acuerdo con información obtenida por este medio vía transparencia, los efectivos del Ejército, cuyo despliegue a nivel nacional asciende a 64 mil 686 elementos, según el último informe de seguridad, son quienes más han resentido estos ataques.
Entre enero de 2019 y el 14 de mayo de 2024, personal del Ejército fue blanco de mil 371 agresiones, que dejaron un saldo de 76 militares fallecidos y 390 heridos.
Pero además de ser la institución con la mayor cantidad de ataques en su contra, el Ejército también registra el mayor número de agresores detenidos, heridos o abatidos como consecuencia de la oportuna respuesta del personal castrense a dichos eventos.
Derivado de las agresiones a miembros del Ejército se logró la detención de mil 77 atacantes, mientras que mil 55 presuntos delincuentes perdieron la vida y 215 resultaron heridos.
La Guardia Nacional, corporación federal creada en esta administración y que tiene un despliegue de 117 mil 723 efectivos, fue objeto de 688 ataques durante el citado periodo.
La más reciente agresión en contra de esta institución se registró el pasado 13 de mayo en el municipio de La Piedad, Michoacán, durante la cual un generador de violencia fue detenido.
Durante los ataques recibidos de enero de 2019 y el 14 de mayo del presente año, 352 integrantes de la Guardia Nacional resultaron lesionados y 39 perdieron la vida.
En cuanto a las bajas que la corporación provocó a la delincuencia organizada, 552 agresores fueron detenidos, 254 fueron abatidos y 85 resultaron heridos.
En tanto, la Secretaría de Marina, mediante el folio número 330026624000943, remitió dos anexos como parte de su respuesta.
En el primero incluyó una tabla en la que se detalla el concentrado de “las agresiones por enfrentamiento” registrados en contra de su personal “en funciones de Guardia Costera en coadyuvancia y apoyo con las autoridades responsables de la seguridad pública, enero de 2019 a diciembre de 2023”.
En dicha información la Semar dio cuenta de un aumento en las agresiones contra su personal, y del número de fallecidos que se registraron de estos ataques. Sin embargo, el documento no precisa cuántos elementos y cuántos agresores perdieron la vida.
En 2019 la institución contabilizó un total de 10 ataques con un saldo de cuatro fallecidos; en 2020 las agresiones ascendieron a 14, con tres muertos. Para 2021 la cifra decayó a cinco enfrentamientos, con cuatro fallecidos, y en 2022 las agresiones aumentaron a 13 con cuatro personas que perdieron la vida.
En 2023, con corte al 18 de diciembre, se registraron 33 agresiones, con un saldo global de 25 personas fallecidas.
Esta cifra revela que el número de agresiones contra los efectivos navales por parte de la delincuencia organizada se disparó 230% entre el primero y el quinto año del actual gobierno.
El grueso de estos ataques se focalizó en Sonora, donde se concentraron 21 de las 70 agresiones registradas entre 2019 y 2023; le siguieron Tamaulipas, Veracruz, Michoacán y Guerrero, donde se registraron un total de 13, 9, 6 y 5 eventos en cada uno.
El resto de las agresiones se distribuyó en otras 12 entidades, en donde se contabilizaron entre una y tres en cada una en esos cinco años.
Focos rojos
Con excepción de los estados de Aguascalientes, Campeche y Yucatán, las agresiones contra efectivos del Ejército y la Guardia Nacional se registraron en 29 entidades.
Aunque cinco estados concentraron el 74% de los ataques contra el personal castrense, fue Tamaulipas la entidad más letal para los militares, pues además de que allí tuvieron lugar tres de cada 10 agresiones, también se registró el mayor número de efectivos fallecidos y lesionados.
El 32% de los ataques contra el Ejército tuvo lugar en cinco municipios, cuatro de los cuales son de Tamaulipas, pero la mayor incidencia se concentró en Nuevo Laredo, Miguel Alemán y la ciudad fronteriza de Reynosa.
Según informes de autoridades mexicanas y de organismos de seguridad extranjeros, como la Agencia Antidrogas de Estados Unidos, en Tamaulipas hay una creciente violencia por la disputa del control territorial por parte de las organizaciones criminales.
Una serie de facciones al servicio de los cárteles del Noreste, del Golfo, de Sinaloa, Jalisco Nueva Generación, y remanentes de los Zetas, entre otros grupos y escisiones, mantienen una pugna por el control de los mercados ilegales de las drogas y de personas indocumentadas.
En cuanto a las agresiones contra el personal de la Guardia Nacional, el mayor foco está ubicado en el municipio de Nuevo Laredo, Tamaulipas, mientras que otros lugares con elevada incidencia de este fenómeno son Uruapan, Michoacán; Culiacán, Sinaloa; Guaymas, Sonora, y Valparaíso, Zacatecas.
A nivel estatal, prácticamente el 60% de las agresiones contra elementos de la Guardia Nacional está concentrado en Michoacán, Jalisco, Sonora, Guanajuato y Zacatecas.
En tanto, Jalisco, considerado el bastión del cártel liderado por Nemesio Oseguera El Mencho, es la entidad donde más elementos de la Guardia Nacional han fallecido a causa de las agresiones recibidas, seguida de Michoacán, donde también el CJNG mantiene una fuerte presencia.
NM
