La Entidad Mexicana de Acreditación (EMA) junto con organismos de acreditación de América Latina el Caribe, llevaron a cabo el lanzamiento del primer programa regional de eco etiquetado, el cual facilita la identificación de productos ambientalmente responsables, independientemente del país en el que se encuentren, fomentando así un mercado regional más verde y consciente.
El grupo inicial de fundadores conformado por representantes de los organismos de Costa Rica, Ecuador y México, establecieron este 10 de julio oficialmente la Alianza Ambiental de América, lo que marca el inicio de este programa regional que ya definió los rubros bajo los cuales se regirá el programa de eco etiquetado regional.
Con esto, se busca estandarizar y promover el uso de etiquetas ecológicas en toda la región, además de proporcionar a los consumidores información clara y confiable sobre el impacto ambiental de los productos que compran.
Este esfuerzo colaborativo es respaldado por de la Cooperación Interamericana de Acreditación (IAAC) e instituciones de metrología la cual está conformada por reguladores, normalizadores, y organismos de acreditación signatarios de los acuerdos de reconocimiento mutuo.
Además, se tuvo la colaboración entre diversos gobiernos, organizaciones no gubernamentales y el sector privado y busca no solo reducir el impacto ambiental de los productos en la región, sino también impulsar la competitividad de las empresas locales en el mercado global, al alinearse con las crecientes demandas internacionales de productos más sustentables.
El programa regional de eco etiquetado abarca una amplia gama de productos, desde alimentos y bebidas hasta textiles y productos electrónicos. Cada categoría de productos tiene criterios específicos que deben cumplirse para obtener la etiqueta ecológica, lo que asegura que los consumidores puedan confiar en la información proporcionada y hacer elecciones de compra más informadas y responsables.
La implementación de este programa no solo tiene beneficios ambientales, sino también económicos y sociales. Al promover prácticas más sostenibles, se espera que las empresas reduzcan sus costos operativos a largo plazo y aumenten su eficiencia. Además, el programa contribuye a la creación de empleos verdes y al fortalecimiento de las economías locales.