De Paseo | Brujas, la Venecia del norte

14 de Octubre de 2024

De Paseo | Brujas, la Venecia del norte

Brujas

Explora esta ciudad medieval, pletórica de pintorescos canales, casas góticas y monumentos históricos, donde cada rincón revela su fascinante legado

Brujas es una ciudad fascinante que se conoce a pie, en bicicleta y, por supuesto, en bote, gracias a sus canales. Su nombre no tiene nada que ver con hechiceras, sino con el holandés antiguo para decir “puente” (brugga).

En 1085, Brujas se convirtió en la capital del condado de Flandes, y en pocos años se volvió un puesto comercial importante para la Liga Hanseática (confederación de ciudades-estado alemanas, escandinavas y bálticas) debido a su posición estratégica entre Londres, Francia, Italia y las ciudades alemanas del interior. En los siglos XII y XIII, Brujas se convirtió en un productor de textiles, especialmente tafetán. Cuando la demanda de estos tejidos cayó, la ciudad innovó y se convirtió en un centro de crédito comercial.

En 1309 Brujas abrió la primera bolsa para el intercambio de valores y desarrolló en los siguientes dos siglos un sofisticado mercado de dinero, convirtiéndola en una ciudad rica en la que florecieron las artes, como la pintura flamenca. Sin embargo, en 1500 su principal canal comenzó a acumular sedimentos, impidiendo la llegada de barcos de la Liga. Con esto concluyó la etapa dorada de Brujas.

Algo que tampoco te puedes perder en la ciudad son sus chocolaterías; una de las más famosas es Leónidas. Te encantará.

Desde el siglo XIX, esta ciudad se volvió un lugar turístico debido a lo bien preservado de sus edificios históricos y al encanto de sus canales. Te mostramos algunos lugares que no te puedes perder.

Markt o plaza mayor. Es el centro histórico de la ciudad. En esta parte se concentraban los puestos de venta desde el siglo X. La zona alberga estatuas de Pieter de Coninck y Jan Breydel, líderes de un levantamiento popular en 1301, y está rodeada de casas medievales, donde destaca el Beffroi y la Corte Provincial.

Campanario. Edificado en madera en 1240, fue destruido por un incendio en 1280 y luego por un rayo. Tuvo varias reformas, hasta que en 1822 se completó la torre de concreto. Se puede subir a la torre y tener desde ahí las mejores vistas de la plaza.

Corte Provincial. Este es un edificio de color blanco con estilo neogótico. Comenzó a construirse en el siglo XIX sobre los restos del Waterhalle, que era un edificio que servía como puerto del canal que llegaba directamente al Markt.

Basílica de la Santa Sangre y la capilla de san Basilio. Construida entre 1134 y 1147 para alojar una reliquia con la sangre de Cristo obtenida durante las Cruzadas. La parte baja es un edificio románico dedicado a San Basilio y la parte superior tiene estilo gótico.

Iglesia de Nuestra Señora. Edificada desde el siglo XIII, destaca por su torre de 122 metros, la más alta de la ciudad. Su interior gótico alberga retablos barrocos y la famosa escultura de la Madonna y el Niño de Miguel Ángel.