El premio nobel de la paz Muhammad Yunus, galardonado por crear un sistema de microcréditos para los pobres, fue designado para dirigir un gobierno interino en Bangladesh, tras la disolución del Parlamento y la huida de la primera ministra Sheikh Hasina.
La decisión de “formar un gobierno interino” liderado por Yunus fue tomada en una reunión entre el presidente Mohamed Shahabuddin, los jefes militares y los líderes estudiantiles que lideraron las protestas a principios de julio, indicó la presidencia bangladesí.
“El presidente pidió al pueblo ayudarle a superar la crisis. Es necesaria la formación rápida de un gobierno interino para superar la crisis”, agregó la misma fuente en un comunicado.
Muhammad Yunus declaró el martes que estaba dispuesto a asumir la jefatura de un gobierno interino, en una declaración escrita enviada a la AFP.
“Siempre he puesto la política a distancia (...) Pero hoy, si es necesario actuar en Bangladesh, por mi país y por el coraje de mi gente, entonces lo haré", declaró Yunus.
El economista de 84 años es conocido por haber sacado a millones de personas de la pobreza gracias a la entrega de microcréditos, una iniciativa por la que recibió en 1998 el premio Príncipe de Asturias de la Concordia y el Premio Nobel de la Paz en 2006. Yunus se ganó la persistente enemistad de Sheikh Hasina, que le acusaba de “chupar la sangre” de los pobres.
Nahid Islam, un dirigente del colectivo de estudiantes, confirmó la decisión a los periodistas tras una reunión de tres horas en la presidencia y calificó las conversaciones de “fructuosas”.
El presidente Shahabuddin aceptó que el gobierno interino “se forme lo antes posible”.
Shahabuddin destituyó igualmente al jefe de la policía nacional tras las mortíferas manifestaciones que provocaron la huida de la primera ministra Sheikh Hasina, indicaron sus servicios.
El presidente Shahabuddin disolvió este martes el Parlamento, una de las exigencias clave de los estudiantes, compartida con la principal formación de oposición, el Partido Nacionalista de Bangladés (BNP), que exige que se convoquen elecciones en los próximos tres meses.
“Confiamos en el Dr. Yunus”, escribió en Facebook Asif Mahmud, uno de los principales dirigentes del colectivo estudiantes.
Sheikh Hasina, de 76 años, estaba en el poder desde hace 15 años, pero su último mandato como primera ministra, que comenzó en enero, estuvo marcado por el boicot de la oposición a las elecciones, que denunció que no fueron libres ni justas.
Hasina terminó dimitiendo y huyó del país el lunes bajo la presión de una ola de protestas que comenzó a inicios de julio con un movimiento estudiantil en contra de un sistema de cuotas para los funcionarios, pero que derivó en una movilización más amplia contra el gobierno.
El jefe del ejército, el general Waker Uz Zaman, anunció el lunes que los militares formarían un gobierno interino.
La policía pide “perdón”
El ejército reestructuró este martes la cúpula militar y depuso a altos mandos considerados como cercanos a Hasina.
También destituyó a Ziaul Ahsan, un oficial involucrado en el Batallón de Acción Rápida, una fuerza paramilitar bajo sanciones de Estados Unidos acusada de violaciones a los derechos humanos.
Desde el inicio de las movilizaciones han muerto al menos 432 personas, según un recuento de la AFP basado en informes de la policía, autoridades y médicos en hospitales, y terminaron con la huida en helicóptero de Hasina.
El lunes los disturbios y enfrentamientos dejaron al menos 122 muertos y pese a que el martes la situación fue menos tensa, reabrieron los comercios y se levantó el toque de queda, se registraron diez muertos.
A última hora del lunes, el jefe del Estado ordenó la liberación de las personas detenidas durante las manifestaciones y de la principal rival política de Hasina, la ex primera ministra Jaleda Zia, del BNP, que estuvo años en arresto domiciliario.
En un comunicado publicado el martes, el principal sindicato de la policía pidió “perdón” por haber disparado contra los estudiantes.
La federación afirmó que los agentes policiales fueron obligados a “abrir fuego” contra los jóvenes y que después, fueron presentados como los “malos”. También anunció una huelga para garantizar la seguridad de los efectivos.
Millones de bangladesíes inundaron el lunes las calles de Daca, la capital, tras la dimisión de Hasina.
Los manifestantes irrumpieron en el Parlamento e incendiaron estaciones de televisión, y algunos destruyeron estatuas del padre de Hasina, Sheikh Mujibur Rahman, quien lideró la lucha por la independencia contra Pakistán en 1971.
MAAZ