Además de los estragos causados por el pésimo manejo de la pandemia de Covid-19, el exsubsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, dejará como herencia al nuevo gobierno un grave problema derivado de la caída en los niveles de vacunación infantil, algo en lo que México llegó a ser un ejemplo para el resto del mundo.
Quienes saben del tema aseguran que López-Gatell estuvo a la cabeza de una serie de decisiones erróneas que llevaron a que la cobertura de vacunación se desplomara, lo que propició el regreso de enfermedades que ya se creían erradicadas.
Pero, lejos de asumir algún tipo de responsabilidad, López-Gatell —nos aseguran— anda en busca de alguna silla en el Palacio del Ayuntamiento. Veremos si lo logra.