En medio de tanta efervescencia política, un hecho que tuvo menos eco del que merecía fue la cadena de golpes que las autoridades de la Ciudad de México dieron a las mafias de Tepito en una semana.
El 19 de marzo fue detenido Eduardo “N”, El Chori, máximo líder de la Unión Tepito. Cuatro días después cayó José Mauricio “N” El Tomate, otro de los líderes de este grupo, y tres días más tarde el golpe lo recibió el núcleo antagónico, al ser aprehendidos seis integrantes de la Antiunión Tepito, entre ellos Mireya, La Patrona, esposa de El Tortas, máximo líder de este clan.
En todos los casos fue clave el trabajo de inteligencia de la Secretaría de Seguridad Ciudadana y de la Fiscalía capitalina. Ahí el dato.