Altura de miras
El mayor deseo tras la jornada electoral es que los perdedores acepten los resultados y los ganadores muestren generosidad; la polarización a nadie conviene ¿lo entenderá la clase política?
Esto es lo que se espera de todos los actores políticos y sociales luego de la histórica jornada electoral que se llevó a cabo este domingo. Lo deseable es que, una vez que la ciudadanía acudió a ejercer su voto, quienes no fueron favorecidos den ejemplo de madurez política y civilidad al aceptar los resultados y las resoluciones de los órganos jurisdiccionales, en el caso de las impugnaciones. De los ganadores se espera generosidad para no denostar a quienes fueron sus adversarios, sino, por el contrario, extenderles una mano para dialogar, darle la vuelta a la página y ver hacia adelante. Continuar con una dinámica de polarización a nadie conviene. ¿Lo entenderá así la clase política? Ya lo veremos.