De los 2 mil 200 millones de niñas y niños que hay en el mundo, el 45%, es decir, mil millones, son afectados por los efectos del cambio climático, pues viven en alguno de los 33 países considerados de “muy alto riesgo”.
El hecho de que mil millones de infantes vivan en países de “muy alto riesgo” compromete su salud, su educación y su protección, y los expone a enfermedades mortales, sostiene el Índice de Riesgo Climático de la Infancia de la Unicef (Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, por sus siglas en inglés).
El panorama que presentó el informe no es alentador, pues indica que el número de afectados seguirá empeorando a medida que los efectos del cambio climático se aceleren.
“Las perturbaciones climáticas y medioambientales están menoscabando la totalidad de los derechos de los niños, desde su acceso a un aire limpio, alimentos y agua potable, hasta su derecho a una educación, a una vivienda, a estar protegidos contra la explotación e incluso a sobrevivir. La vida de prácticamente todos los niños resultará afectada”, declaró Henrietta Fore, directora ejecutiva de Unicef.
Algunos de los datos más destacados del informe sostienen que 240 millones de niños están expuestos a las inundaciones costeras; 400 millones están expuestos a los ciclones; 815 millones están muy expuestos a la contaminación por plomo; y 920 millones están muy expuestos a la escasez de agua.
De los 200 países donde los niños están expuestos a más riesgos debido al cambio climático, México está en el lugar 54 y de los tres rubros a evaluar en el índice resultó mal calificado como un lugar donde predominan las perturbaciones y tensiones ambientales y climáticas.