La entidad con la mayor economía de Estados Unidos, California, votó porque a partir de 2035 se comercialicen solo autos nuevos eléctricos, dejando fuera de los aparadores a los vehículos de combustibles fósiles.
Durante casi cinco horas, miembros de la ciudadanía, organizaciones no gubernamentales en pro del medio ambiente, así como de protección al consumidor expusieron puntos a favor y en contra sobre si el estado de California gradualmente hasta el 2034 permita comercializar autos nuevos a gasolina y diésel, y a partir de 2035 ni uno solo podrá venderse durante una audiencia pública en la California Air Resources Board, la oficina encargada de la regulación ambiental en ese estado.
A partir de 2026, las automotrices deberán vender 35 autos eléctricos de cada 100 vehículos nuevos; el número se incrementará a 43% en 2027. En 2028, uno de cada dos autos nuevos deberá ser eléctrico, gradualmente hasta que en 2035 solo se comercialicen eléctricos en las concesionarias de las armadoras automotrices.
Cabe destacar que el mercado de autos usados, así como gasolina y diésel seguirán fluyendo para los usuarios que tengan uno, aunque no se descartan medidas posteriormente para incentivar el uso de vehículos eléctricos ante los de combustible. Por el momento, el presidente Joe Biden ha prometido que los consumidores que compren los automóviles de baterías tendrán beneficios fiscales que podrían llegar a los 12 mil 500 dólares.
Para las autoridades estadounidenses es muy importante esta decisión debido a que hay una población aproximada de casi 40 millones de ciudadanos y es el estado con más vehículos en ese país.
