La yoga es una práctica muy saludable y te permite conectar tu mente, cuerpo y respiración a través de posturas físicas, ejercicios de respiración y meditación que permiten oxigenar el cuerpo y lograr un bienestar general.
Su origen fue en la India y es una disciplina física y mental que asocia la meditación con el hinduismo, budismo y jainismo.
Existen varios tipos de yoga, descifra cuál es el adecuado para ti y lánzate a practicarlo.
Hatha Yoga
Es el que se encuentra de forma común en los centros donde se practica esta disciplina.
Es conocido por sus posiciones corporales (asanas) y lleva a cabo un sistema de posturas físicas cuyo propósito es lograr que el cuerpo esté apto para meditar. Las asanas generan serenidad física y mental, por lo que puedes sentarte durante horas en una misma postura para meditar sin sufrir fatiga ni inquietud si lo practicas de la forma correcta. La reconocerás, ya que una de sus principales asanas es el Suria Namaskar (saludo al sol)
Bhakti
Esta yoga es devocional. Interesa en su práctica la devoción y el conocimiento más profundo y esotérico de la naturaleza del Krisna (Dios). Sus actividades provienen de escrituras puránicas del siglo XI d.C.
Ashtanga vinyasa
Se basa este sistema de yoga en el texto Yoga korunta. Incorpora las ocho ramas tradicionales de la yoga conocidas como ashtanga-yoga en sus yoga-sutras. Enfatiza en el viniasa (movimiento sincronizado con la respiración mediatante un método progresivo de posturas y respiración.
Kundallini
Por medio de sus asanas, pranaiama (control de la respiración), canto de mantras, mudrás (gestos rituales) y ejercicios se realiza este tipo de yoga.
Las posturas son sencillas y van acompañadas de una respiración dinámica.
Si realizas de forma cotidiana estas prácticas, tendrás y sentirás mayor bienestar en tu cuerpo y mente, así como elasticidad, postura y más relajación.