Pese que varias ciudades de Estados Unidos han propuesto que algunas vacunas que están próximas a expirar, sean donadas a entidades cercanas de México para que no se desperdicien, el Grupo de Trabajo sobre Vacunas de la Casa Blanca se rehúsa a poner en marcha esta acción.
De acuerdo con información divulgada por el diario The Washington Post, la dura y estricta decisión se debe a que las biológicos son propiedad del gobierno federal y no de los estados o ciudades que han expresado su disposición para donarlos.
Por ello, de ser enviados a otros países el gobierno federal es responsable de su uso, además que, de dar luz verde a esta iniciativa, las vacunas tendrían que regresar primero a Washington y ser enviadas desde ahí.
Cabe señalar que la Casa Blanca tiene su propio programa para donar vacunas, generalmente a través del Departamento de Estado y la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional.
Según el sitio del Post, este bloqueo ha causado especial frustración en los trabajadores de la salud, quienes han visto la demanda de vacunas que tiene el territorio mexicano y la facilidad con la que pudiesen transportar las dosis a los centros de vacunación de estados cercanos como Tijuana y Mexicali.
“Parecía un ganar-ganar y algo consistente con los objetivos de la administración de Biden”, dijo Adolph Edwards, director ejecutivo de El Centro Regional Medical Center en California a The
Washington Post.
“Del lado mexicano, nos estaban pidiendo ayuda. Es irritante que tuviéramos que decir que no, cuando hubiera sido tan fácil marcar la diferencia”, agregó.
Esta situación no es nueva, pues hace meses, médicos y funcionarios de San Diego identificaron que cerca de 10 mil dosis de vacunas estaban por vencer, por lo que en conjunto con autoridades en Baja California, aceptaron transportarlas y entregarlas. Este lote fue destinado a un centro de vacunación en un centro comercial de Mexicali. Hay que aclarar que esto se dio antes de que llegara el mensaje por parte de las autoridades federales.
La Casa Blanca se ha escudado en que si estados como California, comienzan a distribuir vacunas dañadas, el gobierno federal sería el único responsable.
Dato. El 53% de los mexicanos han recibido al menos una dosis.