La reconstrucción de la ciudad de México es una “bomba de tiempo” y mientras no se vuelva a la normalidad en las zonas afectadas, los conflictos sociales irán en aumento, alertó Nashieli Ramírez Hernández, la recién electa presidenta de la Comisión de Derechos Humanos capitalina (CDHDF). Durante un encuentro con medios de comunicación, la ombudsperson reveló que hasta ahora han recibido 30 quejas relacionadas a la demolición de inmuebles afectados por el terremoto del pasado 19 de septiembre, por falta de dictamen definitivo. Además de una de oficio por un inmueble ubicado en Taxqueña y ocho por la situación que prevalece en los albergues. Respecto a las quejas, detalló que la delegación Benito Juárez es la que concentra el mayor número de inconformidades. Aseguró que 52 días después de la tragedia, las personas aún no han podido volver a la normalidad, por lo que mientras no se resuelvan las necesidades de los damnificados, el conflicto social que se ha generado podría aumentar. Finalmente, la titular de la CDHDF afirmó que su prioridad será el tema de la reconstrucción; sin embargo, adelantó que trabajará para cambiar la imagen del organismo a su cargo, el cual ha sido señalado de estar al servicio de los delincuentes (Foto: Moisés Pablo / Cuartoscuro). MR/EC