La cooperación estadounidense es parte de su lucha contra el autoritarismo internacional, soltó el presidente Joe Biden antes de su reunión privada con el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador.
Pero el presidente estadounidense fue más allá, confió en que su alianza con su socio demuestre que “las democracias pueden funcionar… La democracia en los últimos 20 años se ha visto reducida, son menos”.
La Cumbre de los llamados “Tres Amigos” concluyó sin haber resuelto desacuerdos comerciales en el tema energético y en el sector automotriz, que están vinculados al T-MEC (Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá).
En sus respectivos discursos, los mandatarios evitaron la confrontación y los asuntos que se han avivado en días recientes, como la propuesta de mayores estímulos fiscales en la compra de vehículos eléctricos hechos casi en su totalidad en Estados Unidos, o la disputa de las empresas norteamericanas de energía y el gobierno de México.
Por el contrario, Joe Biden, presidente de Estados Unidos, Andrés Manuel López Obrador, de México, y de Canadá, Justin Trudeau, hicieron de la Cumbre, el lugar para coincidir.
El mandatario estadounidense señaló que, “se deben tomar acciones decisivas para reducir el cambio climático, asimismo, enfrentar los retos de migración y llevar adelante una recuperación económica”.
Amdrés Manuel López Obrador tomó como punto de partida la integración de la región para combatir la expansión del comercio de China.
Recordó que en 1990, el país asiático únicamente tenía el 1.7% del comercio global, mientras que los tres países que conforman Norteamérica representaban el 16 por ciento. Después de 31 años, China se ha apropiado del 14.4%, mientras que Estados Unidos, México y Canadá lo han reducido a 13%, recalcó el mexicano.
Pidió a sus homólogos la unión comercial y económica, de lo contrario en otros 30 años China podría tener el 42% del mercado mundial, mientras que sus países se quedarán con el 12%, y agregó, “es una desproporción inaceptable en el terreno económico”.
Ante la crisis de falta de mano de obra en Estados Unidos y Canadá, el mandatario Mexicano propuso que se abra el flujo migratorio de una manera ordenada como parte del T-MEC.
En tanto, el presidente de Canadá, Justine Trudeau agradeció el haberse organizado nuevamente la cumbre después de la última en 2016, de la cual él fue el anfitrión y recibió en ese entonces a los ahora expresidentes, Peña Nieto y Barak Obama.