A casi un mes de la elección un mes busca de la dirigencia del partido, Bertha Elena Luján Uranga pidió licencia para separarse de su cargo como presidenta del Consejo Nacional de Morena.
En un comunicado del partido político se estableció que la petición se hizo dando cumplimiento a los lineamiento emitidos por la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia del 23 de septiembre del año en curso.
“Es por ello que estoy solicitando licencia a mi encargo y reitero que seguiré trabajando y luchando en la construcción de la Cuarta Transformación, en la trinchera que me toque estar a futuro”, precisó en el texto.
En conferencia de prensa, Bertha Luján presentó su proyecto de trabajo para fortalecer al partido que incluyen la reorganización de comités y asambleas locales, estatales y nacionales, así como el fortalecimiento de las “alianzas estratégicas” con otros actores políticos.
Sobre los hechos de violencia ocurridos en Culiacán Sinaloa, resultado de un operativo fallido, como reconoció el gobierno federal, aseguró que “evidentemente hay que remendar la plana”.
“Si no se siguió el proceso jurídico quiere decir que hay que remendar la plana. Hay que cumplir con los requisitos jurídicos y entonces actuar”, manifestó aunque rechazó que con los hechos se otorgue “una tarjeta de
impunidad al narco”.
Expuso que incluso la respuesta agresiva del crimen organizado sería una respuesta al combate frontal que hoy hace el gobierno federal a la inseguridad.
Dijo que la violencia no es algo nuevo en el país sino consecuencia del deterioro del tejido social y económico; “lo que estamos viviendo es respuesta a la acción del gobierno por acabar con la impunidad”, abundó.
Bertha Luján manifestó sin embargo su apoyo al gobierno federal en la lucha contra la inseguridad y de las bandas criminales, así como en la búsqueda de la paz del país.
Descartó que los hechos lastimen la credibilidad del partido en el poder y que el gobierno esté “dando de palos al avispero como vimos en otro sexenio”’, pues tiene una estrategia de seguridad porque bien pudo actuar “de otra manera”, pero privilegió la seguridad de la ciudadanía.