El senador estadounidense
Bernie
Sanders, aspirante a enfrentar a Donald Trump en las elecciones de 2020, suspendió temporalmente el miércoles su campaña para convertirse en el candidato presidencial del Partido Demócrata tras ser tratado por un bloqueo arterial, informó su equipo.
“Durante un evento de campaña ayer (martes) por la noche, el senador Sanders experimentó algunas molestias en el pecho. Después de la evaluación médica y los exámenes, se descubrió que tenía un bloqueo en una arteria y se insertaron con éxito dos ‘stents’”, dijo el asesor principal de Sanders, Jeff Weaver, en un comunicado.
“El senador Sanders está conversando y de buen humor. Estará descansando en los próximos días”, agregó, señalando que sus eventos fueron cancelados “hasta nuevo aviso”.
Sanders, de 78 años, ha sido desde 1991 un legislador independiente en el Congreso estadounidense, alineado con los demócratas, primero como representante de Vermont y, desde 2007, como senador.
El senador -que perdió en 2016 la primaria demócrata frente a Hillary Clinton, derrotada finalmente por Trump- anunció en febrero que competiría otra vez por la nominación. Las encuestas de intención de voto lo colocan peleando el segundo lugar detrás del ex vicepresidente Joe Biden, quien es dos años menor que él.
Desde julio, Sanders, que se describe a sí mismo como un “socialista”, ha estado cabeza a cabeza en ese puesto con la senadora de Massachusetts Elizabeth Warren, de 70 años, quien recientemente se adelantó ligeramente en los sondeos.
La edad de Sanders y de Biden se ha planteado como un problema para sus candidaturas. Pero la salud de Sanders generalmente ha sido buena. En marzo se cortó la cabeza en la puerta de la ducha y debió recibir siete puntos de sutura, pero rápidamente regresó a la campaña.