El actor Ben Affleck ingresó en un centro de rehabilitación para intentar superar su adicción al alcohol. Se trata del tercer tratamiento al que el intérprete se somete. El último fue hace menos de un año. Su ex esposa Jennifer Garner fue quien le hizo ver que estaba perdiendo el control de nuevo y necesitaba recibir urgentemente ayuda profesional, por lo que se encargó de llevarlo en coche hasta el centro de Malibú donde se espera que pase varias semanas bajo tratamiento. Ben fue fotografiado a bordo de un vehículo tras salir de su casa. En la imagen se le ve con un aspecto visiblemente desmejorado que vendría a confirmar los rumores de que había vuelto a sumirse en el alcoholismo, esto tras su ruptura con Lindsay Shookus. La primera vez que se rehabilitó fue en 2001 y el pasado noviembre, Ben Affleck recayó en sus problemas con el alcohol y tuvo que ingresar unos días en un centro de desintoxicación. SC