Una serie de experimentos con células en cultivo y con hámsters muestran que el sublinaje BA.2 de la variante de preocupación Ómicron no sólo se transmite con mayor velocidad que la BA.1, sino que además podría provocar enfermedad más grave; el drástico aumento en el número de muertes en Dinamarca, donde BA.2 ya es dominante, parece confirmarlo.
El reporte de la investigación, que se publicó el miércoles en medRxiv y aún falta que sea revisado por pares, está firmado por alrededor de 50 investigadores de diversas universidades e instituciones de investigación sobre todo japonesas.
Los experimentos con cultivos de células de epitelio nasal humano mostraron que en este tejido BA.2 se reproduce más rápidamente que BA.1, pero también que es “más fusogénico”. Este término hace referencia a una capacidad que tienen diversos virus, el SARS-CoV-2 entre ellos, por la que una célula infectada se fusiona con otras sanas, de manera que logra contagiar sin que el virus salga de la célula y por lo tanto no es detectado por anticuerpos.
Por otra parte, cuando se hicieron infecciones en hámsters, BA.2 les produjo enfermedad más grave que BA.1.
Además, los investigadores demostraron que BA.2 es resistente a los anticuerpos humanos inducidos por BA.1, dato que se suma al del estudio publicado también el medRxiv y reportado ayer en estas páginas, que encontró que BA.2 no es detectado por anticuerpos monoclonales que sí detectan a BA.1.
Que BA.2 pueda efectivamente producir enfermedad más grave podría explicar lo que se está observando actualmente en Dinamarca, donde este sublinaje ya está presente en alrededor del 90% de las secuenciaciones y dónde está ocurriendo un crecimiento acelerado en el número de muertes por la Covid-19, acercándose a las cinco diarias por millón de habitantes, cifra 10 veces más grande de lo que se registró en ese país entre febrero y noviembre de 2021.
Los autores del nuevo reporte dicen que sus datos justifican que BA.2 sea considerada una variante de preocupación distinta a Ómicron.
