Aviones Boeing regresan al aire entre dudas sobre su seguridad
EVERETT, WA - JANUARY 24: A Boeing 777X taxis at Paine Field on January 24, 2020 in Everett, Washington. The plane is the latest iteration of its popular wide body model, which feature more fuel efficient engines than its predecessor and composite wings. Boeing was forced to scrub the first flight of its newest aircraft for the second day due to poor weather conditions. Stephen Brashear/Getty Images/AFP
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La compañía niega que las fallas eléctricas estén relacionadas con la pérdida de dos aviones, en Indonesia y Etiopía, que cobraron la vida de 346 personas
Algunos especialistas ponen en duda el funcionamiento de los aviones Boeing debido a las fallas que han presentado recientemente.
En un reportaje publicado en la agencia de noticias BBC, se pone en cuestión la autorización de vuelos de esta compañía tan solo seis meses después de que los reguladores estadounidenses autorizaran a volar de nuevo al 737 Max de Boeing.
El intenso escrutinio se debe a que descubrió una falla eléctrica en estos aviones el mes pasado. De ahí que haya preocupación por la rapidez con la que permitieron el regreso de ese tipo de aviones al aire.
Señalan que ese problema puso de nuevo a tierra a más de 100 aviones, pertenecientes a 24 aerolíneas de todo el mundo.
Boeing y el regulador estadounidense, la Administración Federal de Aviación, dicen que están trabajando en estrecha colaboración para abordar el problema.
La Administración Federal de Aviación (AFA) de Estados Unidos y la compañía Boeing aseguran que trabajan en estrecha colaboración para abordar el problema, debido a que se han suspendido las entregas de muchos más aviones nuevos.
El asunto ha dado nueva energía a los críticos que afirman que se permitió que el 737 Max volviera a funcionar de manera prematura, y que los problemas que podrían haber contribuido a dos accidentes fatales no se han analizado ni abordado por completo, dice la publicación.
La falla eléctrica se atribuyó a una conexión eléctrica deficiente, donde los ensambles de paneles que también estaban destinados a conducir electricidad y formar parte de una conexión con el marco de la aeronave no lo estaban haciendo de manera efectiva.
“(Esto) afectar el funcionamiento de ciertos sistemas, incluida la protección contra el hielo del motor, y provocar la pérdida de funciones críticas y / o múltiples efectos simultáneos en la cabina de vuelo, lo que puede impedir la continuidad del vuelo y el aterrizaje seguros”, señaló a AFA.
La falla del sistema eléctrico hace peligroso los viajes en este tipo de aeronaves. La compañía y la reguladora estadounidense negaron que esta falla esté relacionada con la pérdida de dos aviones, en Indonesia y Etiopía, que cobraron la vida de 346 personas.
Sin embargo, un denunciante de alto perfil, Ed Pierson, asegura que la falla eléctrica afecta componentes esenciales para la navegación espacial de las aeronaves, poniendo en riesgo a los usuarios.
Pierson dice que ha escrito al secretario de Transporte de Estados Unidos, Pete Buttigieg, solicitando una reunión para exponer sus preocupaciones, pero no ha recibido respuesta.
Por su parte Boeing niega enfáticamente cualquier conexión entre los estándares de producción en la fábrica del 737 y los dos accidentes que involucraron al 737 Max.
La acusación de que Boeing dio prioridad a las ganancias sobre la seguridad en el período previo a los dos accidentes no es nueva, y de hecho fue hecha por los fiscales cuando anunciaron un acuerdo de 2.5 mil millones de dólares con el gigante aeroespacial a principios de este año. DJ
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