El presidente de Brasil, Michel Temer, será interrogado por la policía federal de Brasil en el marco de las investigaciones en su contra por corrupción, obstrucción de la justicia y organización criminal, informó este martes la máxima instancia judicial del país.
El Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil dio luz verde este martes y autorizó a la policía a interrogar a Temer por escrito. El juez instructor Edson Fachin, el relator de la operación “Lava Jato” en el alto tribunal, ordenó que el interrogatorio “sea recogido por escrito” y dijo que Temer tendrá 24 horas para responder a las preguntas formuladas por la Policía Federal. Fachin está a cargo de las investigaciones contra Temer y su exasesor, el diputado suspendido Rodrigo Rocha Loures, derivadas de la delación premiada de ejecutivos de la mayor empresa cárnica del mundo, JBS. El mandatario se encuentra en ojo del huracán desde que hace dos semanas salió a la luz una grabación hecha por uno de los dueños de JBS, Joesley Batista, en la que Temer parece dar aval al pago de un soborno. Batista dijo también a la justicia que Rocha Loures fue designado directamente por el presidente para recibir sobornos a cambio de favores a la empresa y el entonces diputado fue filmado cuando recibía una maleta con lo que sería un primer pago de 500.000 reales (unos 153.400 dólares). La fiscalía general acusa a Temer de corrupción pasiva, obstrucción a la justicia y organización criminal. Negándose a dimitir, el mandatario lucha por su supervivencia política a un año de haber asumido el poder tras la destitución de la izquierdista Dilma Rousseff, de quien era vicepresidente. Mientras su base aliada se erosiona y en las calles miles piden elecciones “Directas ya”, al presidente se le acumulan los pedidos de “impeachment” en el Congreso, que ya discute a puerta cerrada una eventual sucesión. Muchos legisladores creen que el Tribunal Superior Electoral (TSE) puede asestar un golpe letal a Temer en otro caso, con un juicio que inicia el próximo 6 de junio, que podría derivar en la anulación de su mandato presidencial. El TSE juzgará si hubo irregularidades en el financiamiento de la campaña de 2014 en la que resultó reelegida la fórmula Rousseff-Temer. (Con información de AFP) EC