El Ministerio de Salud de Israel reportó que en el país hay 10 mil 202 nuevos casos de Covid-19 diagnosticados, que 168 personas estaban en estado grave, 37 de ellas clasificadas como críticas y que 13 personas han muerto debido a esta enfermedad en la semana que acaba de terminar.
Estas cifras son aún más alarmantes al ser dimensionadas, pues, de acuerdo con el diario The Times of Israel, los nuevos casos se detectaron con cerca de 30 mil pruebas, por lo que la tasa de positividad es de un elevado 38.9%, y el número de enfermos graves creció en 95% desde la semana pasada.
Por otra parte, llama la atención que estos casos se produzcan en uno de los países con un alto índice de vacunación (66% de la población con dos dosis y 72% con al menos una) y que a principios de este año llegó a reportar alrededor de 10 mil contagios en un solo día, sobre todo de las primeras subvariantes de Ómicron (BA.1 y BA.1.1).
El aumento en el número de infecciones por el SARS-CoV-2 y los pacientes gravemente enfermos de las últimas semanas representa “una preocupación real a medida que el país se enfrenta a la propagación de la nueva variante BA.5”, indica el diario israelí.
Esta información es consistente con la investigación que se publicó la semana pasada que encontró que tres nuevos sublinajes de Ómicron (BA.5, BA.4 y BA.2.12.1) pueden evadir la inmunidad de las vacunas, de variantes previas y hasta de las primeras subvariantes de Ómicrón.
En México, de acuerdo con la base de datos GISAID, la presencia de la subvariante BA.5 tuvo un crecimiento de seis puntos porcentuales en la última semana, al pasar de 3% a 9% de los casos.
A nivel mundial, BA.5 ha pasado de estar en menos del 1% de los casos secuenciados en los primeros meses de mayo a estar en alrededor del 17% para el 15 de junio, sobre todo en Sudáfrica, Singapur e Israel.
The Times of Israel destaca que en el país se levantó oficialmente el mandato de usar cubrebocas en interiores el 24 de abril, eliminando una de las pocas restricciones restantes de coronavirus que aún estaban vigentes más de dos años después de la pandemia.
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