El presidente de Siria, Bashar al Asad, aseguró que su país no posee más armas químicas y desmintió que su poder armamentista fuera afectado por el bombardeo de Estados Unidos, como señaló el gobierno de Donald Trump.
Precisó que el presunto ataque químico contra una ciudad rebelde en Siria fue un “invento al 100%". 
“Estados Unidos es cómplice de los terroristas y montó toda esta historia para que sirviera de pretexto al ataque”, señaló Al Asad.
Aseguró que solo aceptará una investigación internacional imparcial. Por ello, dijo, trabajará de la mano con Rusia.
Asad afirmó que Estados Unidos no es “serio” en la búsqueda de una solución política para Siria, y lo acusó de utilizar el proceso de Ginebra para ayudar a los rebeldes que pierden terreno frente al régimen.
“Estados Unidos no es serio [en la búsqueda] de una solución política, sea cual sea. Quieren utilizar el proceso político como un paraguas para los terroristas”, dijo en una entrevista exclusiva concedida el miércoles a AFP en Damasco.
Incluso acusó a ese ese gobierno de hacer un montaje para tener un pretexto para atacar a su país.
Recordó que desde 2013, Siria renunció a todo su arsenal químico. (AF) EC
