Las Fuerzas Armadas israelíes anunciaron el lunes el envío de refuerzos hacia la zona de la Franja de Gaza y el primer ministro Benjamin Netanyahu decidió regresar precipitadamente desde Washington luego de que un cohete disparado desde el enclave cayera sobre una casa al norte de Tel Aviv.
Este lunes un cohete disparado desde el sur de la Franja de Gaza cayó sobre una vivienda en Mishmeret, al norte de Tel Aviv, hiriendo a siete personas.
La respuesta israelí, sistemática cuando los cohetes alcanzan zonas civiles, todavía no intervino.
Las Fuerzas Armadas israelíes acusaron al movimiento islamista Hamas por el disparo de un “cohete de fabricación local”.
El mando militar israelí decidió además enviar “dos brigadas de refuerzo a la zona del comando sur”, la región de la Franja de Gaza, y convocar a un determinado número de reservistas, sin precisar qué cantidad.
Hamas, que controla el enclave, negó responsabilidad en el disparo, mientras que Yihad Islámica, segundo grupo armado de Gaza, advirtió que su reacción estaría a la altura de la “agresión” israelí, por lo que se teme una escalada.
Netanyahu, que se encuentra de visita en Estados Unidos, prometió responder “con fuerza” al ataque “criminal” y decidió “acortar” su viaje.
“En una horas, me reuniré con el presidente (estadounidense Donald) Trump y justo después, volveré a Israel para dirigir de cerca nuestras operaciones”, anunció antes de que el presidente estadounidense lo recibiera en la Casa Blanca.
En plena campaña electoral en Israel para las legislativas del 9 de abril, en las que Netanyahu aspira a imponerse para un nuevo mandato, el primer ministro sostuvo que se cometió “un ataque criminal contra el Estado de Israel y vamos a responder con fuerza”.
Un organismo que depende del ministerio de Defensa israelí anunció el cierre de los pasos fronterizos para personas y bienes entre Israel y el enclave palestino.
La fuerzas israelíes responden sistemáticamente a los disparos de cohetes provenientes de Gaza atacando posiciones militares de Hamas, que controla la Franja de Gaza.
Israel y Hamas se enfrentaron en tres guerras en la Franja de Gaza desde que el movimiento islamista tomó el poder por la fuerza en 2007 luego de que la comunidad internacional rechazara reconocer su victoria en las elecciones legislativas palestinas.
En 2018 las dos partes casi terminan en guerra. Tras un alto el fuego informal en noviembre y a medida que se acerca el primer aniversario de las manifestaciones llamadas de la “Gran marcha del regreso”, la tensión aumenta.
La caída del cohete en una casa de Mishmeret provocó un incendio, según la policía y los servicios de auxilio.
Cuatro adultos y tres niños, entre ellos un bebé de seis meses, fueron hospitalizados, indicó el hospital de Kfar Saba. Seis son de la misma familia y tienen quemaduras y heridas leves por esquirlas.
Aniversario bajo tensión
Un alto responsable de Hamas declaró a AFP que el cohete podría haber partido por error por el mal tiempo.
“Nadie en los movimientos de resistencia, inclusive Hamas, tiene interés en disparar cohetes desde Gaza contra el enemigo”, dijo, denotando así una voluntad de evitar un conflicto mayor.
Netanyahu también parece reticente a una operación militar importante.
El último enfrentamiento serio entre Gaza e Israel fue a mediados de marzo cuando las fuerzas israelíes procedieron a bombardear un centenar de objetivos de Hamas, entre ellos lo que los israelíes presentaron como un importante complejo subterráneo para fabricar cohetes, en represalia a disparos hacia territorio israelí.
Cuatro palestinos resultaron heridos en esos ataques.
La prensa israelí mencionó la posibilidad de que los cohetes, de tipo Fajr, se hubieran activado de manera accidental en una operación de mantenimiento.
Hamas y Yihad Islámica negaron haber sido los responsables de esos disparos.
Esta nueva escalada se produce a sólo días del 30 de marzo, primer aniversario de la “Gran marcha del retorno”, una movilización contra el bloqueo israelí del enclave y por el derecho a los palestinos a regresar a sus tierras de las que huyeron o fueron expulsados con la creación de Israel en 1948.
Este aniversario da lugar a una importante movilización palestina.
Desde marzo de 2018, al menos 258 gazatíes murieron por disparos de soldados israelíes, la gran mayoría en las manifestaciones a lo largo de la frontera entre la Franja de Gaza e Israel. Dos soldados israelíes fallecieron desde esa fecha.
El enviado de Trump para Medio Oriente, Jason Greenblatt, condenó la “violencia venida de Gaza” y defendió el “derecho de Israel a defenderse”. La ONU y la Unión Europea también condenaron el disparo.