En los meses que siguieron a la victoria de Andrés Manuel López Obrador como Presidente de México, el peso y las acciones mexicanas se recuperaron por el beneficio de la duda otorgado por los inversionistas extranjeros al morenista, revela Wall Street Journal. Desde entonces, la cancelación el NAIM y las consultas para que los votantes tomen decisiones clave sobre políticas públicas han generado alarmas, y chocado con los temores de muchos líderes empresariales que ven a AMLO como un populista autoritario con una “fuerte inclinación por la intervención estatal en la economía”. “Creo que López Obrador ha mostrado sus verdaderos colores (…) Ni siquiera ha asumido el cargo de Presidente, y está mostrando una verdadera racha autoritaria”, señaló el economista jefe de BCP Securities en Greenwich, Walter Molano. El peso ha sufrido de un “sube y baja” constante, desde la cancelación del NAIM, y señalado como una de las monedas de mercados emergentes con peor desempeño en el mundo, cayendo a más de 5% frente al dólar. Mientras que las acciones mexicanas bajaron 7.6% y las tasas de interés de los bonos del Gobierno a 10 años aumentaron a 9% desde el 7.7% del 2 de julio, revela el diario estadounidense. “Ha sido como un balde de agua fría… para quienes pensaron que AMLO sería pragmático”, advirtió Marco Oviedo, economista jefe para América Latina de Barclays. Además, indica que varios gestores de fondos de mercados emergentes están reconsiderando las inversiones en México o reduciendo la exposición en respuesta. El WSJ asegura que, tras dos décadas siendo uno de los mercados emergentes más seguros para los inversionistas, de cambiar, México se podría enfrentar a un retorno a la clase de turbulencia financiera que lo sacudió en los años 70, 80 y principios de los 90. MAAZ