Las elevadas concentraciones de plomo, bario, cadmio, cobre, estaño y níquel, derivado de las actividades humanas amenazan los arrecifes del litoral de Veracruz.
Un estudio reciente de científicos de la UNAM alertó sobre el peligro para esa zona por la industria petrolera, la agricultura, el turismo y la sobrepesca.
El académico del Laboratorio de Geoquímica de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Iztacala de la UNAM, Guillermo Horta Puga, dijo que al ritmo de destrucción actual hay una alta posibilidad de que para 2050 este hábitat desaparezca.
“Es el ecosistema más extenso que tenemos en el Golfo de México, está formado por más de 50 arrecifes, geológicamente bien desarrollados”, señaló.
En Veracruz, dijo, se ha encontrado bajo el impacto de las actividades humanas prácticamente desde tiempos prehispánicos”.
Indicó que, con la construcción de la ciudad y el puerto de Veracruz, y la última ampliación, el impacto es mayor; sobre todo sumado a las actividades agropecuarias e industriales realizadas en el continente, que vierten desechos hacia las cuencas y por los ríos llegan hasta la zona costera.
Destacó que el sistema veracruzano tiene concentraciones de metales pesados como plomo, proveniente de gasolinas que se usaron durante años. DJ
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