A pesar del entusiasmo que generó la apertura de los archivos históricos del extinto Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen), será hasta 2027 cuando podrán ser consultados en el Archivo General de la Nación (AGN), así lo expuso en entrevista con ejecentral, Carlos Ruiz Abreu, director de este órgano desconcertado.
“Podemos hablar de unos seis u ocho años, mínimo. Lo más seguro es que los archivos del Cisen nos los den con corte a 2009. Aquella información de 1985 a 2001 se trajo sin ordenar y sin clasificar”, aseguró.
Además de que la mayoría de estos documentos contienen información sensible que debe catalogarse de acuerdo al criterio del AGN, por lo que el proceso podría tardarse aún más.
›A decir del nuevo director del AGN, la entrega de documentos por parte del gobierno del expresidente Vicente Fox fue una simulación, ya que transfirió 58 mil 302 expedientes pertenecientes a la Dirección Federal de Seguridad (DFS) y a la Dirección de Investigaciones y Seguridad (IPS), correspondientes al periodo de 1947 a 1985, pero éstos se abrieron a medias, pues el extinto Cisen se encargaba de resguardarlos.
Otra de las problemáticas que enfrenta, señaló, es que sólo 25% del universo del Archivo está catalogado. “Nos estamos preocupando y ocupando de la clasificación. Es penoso lo que yo tengo que decir, que hay fondos de la época colonial, de hace 300 años ¡que no están catalogados! ¡Sólo 25% del universo del Archivo está catalogado!”
De acuerdo con el historiador egresado de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el AGN tiene una tarea más: reclasificar las versiones públicas de los expedientes resguardados, ya que la nueva Ley Federal de Archivos en su artículo 27 se armonizó con la Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública, y obligó a testar los datos considerados como sensibles, es decir, nombres, información de menores de edad, direcciones, ideologías y preferencias sexuales, por mencionar algunos.
Así, Ruiz Abreu explicó la importancia de resguardar esta información, pues en caso de que algunos de los protagonistas que aparecen en estos documentos siguieran vivos, podría ser perjudicial.
“Tú, de quien habla el expediente, lo traicionaste a él, en estos momentos, si está vivo este personaje, puede ir a tu domicilio —porque ahí aparece— y también (podría) matarte”, ejemplificó.
Y es que lo acontecido desde el anuncio del acuerdo presidencial, le recordó a Ruiz Abreu lo que ocurrió en Alemania oriental, tras la caída del muro de Berlín, cuando se abrieron los archivos del Ministerio para la Seguridad del Estado (Stasi, por sus siglas en alemán).
Aunque aquel caso tenía una salvedad con lo que acaba de ocurrir en México: “Los abrieron hace 30 años y se volvieron locos. Era tal la atrocidad que emitían esos documentos: el ser humano a su máxima expresión de crueldad, de bajeza, de instintos que no se ven en estos expedientes que tenemos nosotros”, dijo.
Modificaciones en ciernes
Los cambios dentro del Archivo se enfilan a corregir el retraso en la catalogación de fondos, dice Ruiz Abreu, que corresponde a 75% del universo del Archivo. En un recorrido hecho por este periódico semanal, acompañado por Ruiz Abreu, se constató que la reorganización del Archivo General comenzó desde hace un mes, con la reubicación de las salas de consulta y de referencias, vitales para la búsqueda de información de cualquier usuario del recinto. Colombia, Alemania y Brasil son ejemplos que han sido estudiados en cuanto al manejo de sus fondos dentro de un Archivo, algo a lo que aspira México a través del AGN, reconoció Ruiz Abreu.
Sobre las arbitrariedades que se cometían en anteriores gestiones como el préstamo arbitrario de materiales, Ruiz Abreu reconoció que de ello tenía conocimiento: “Los investigadores a mí me lo externaron (…) ahorita que tú me dices que no le dieron un expediente, se me hace hasta normal. No me extraña”.
A pregunta expresa sobre el acoso del personal del Archivo hacia investigadores, Ruiz Abreu refirió que los usuarios pueden sentirse en libertad de encontrarlo en su despacho para externarle el problema: “He bajado con algunos investigadores que han tenido fricciones con el servicio. Yo bajo personalmente”.
Frases para Archivistas
A Carlos Ruiz Abreu se le leyeron citas de dos personajes, el poeta Octavio Paz y el historiador francés Marc Bloch; después se le pidió una reflexión sobre ellas. Estas fueron sus respuestas:
“La poesía es la memoria de la vida y los archivos son su lengua”: Octavio Paz.
“¿Qué te puedo decir yo, que he vivido en los archivos durante 40 años? He leído miles de miles de expedientes. He escrito más de 28 libros, he vivido de los archivos, entonces esa es una frase bellísima, elocuente y brillante”.
“Los documentos son como los testigos, hablan sólo si se les interroga”: Marc Bloch.
“La validez de esta frase es porque la historia la escribimos desde nuestro presente para entender lo que fuimos y es precioso cuando nosotros nos involucramos en el pasado, nos sumergimos en él y estamos viviendo situaciones, épocas a través de los documentos (...) Tú lees los documentos y empiezan a formar parte de tu vida, de una investigación y empiezas a tener un diálogo con el documento, con los expedientes, con un tema en específico y ese es el verdadero sentido de la historia”.
