La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) hizo un llamado a tener en 2023 un nuevo comienzo que permita la búsqueda de la paz, esto en medio del clima de violencia que se vive en el país, que incluso llevó a establecer las Jornadas de Oración por la Paz.
Ramón Castro Castro, secretario general del CEM, dijo en su mensaje de Año Nuevo que hay situaciones que se siguen extendiendo en todo el país “como un cáncer” que enferma a la población.
Entre estas situaciones, mencionó el narcotráfico, la corrupción, la impunidad, la mala política, la pobreza, el odio, la polarización y el egoísmo.
Si bien señaló que el 2023 permitirá “recomenzar desde la triste experiencia de la pandemia”, a ello se suman los estragos de la violencia “ante la falta de seguridad que día con día se han notar”.
Te puede interesar: Iglesia Católica pide por la seguridad de los periodistas
Monseñor Ramón Castro Castro señaló el año por delante da la oportunidad de “trazar juntos caminos de paz” mediante la unidad y la solidaridad.
“Ante las situaciones de injusticia y de violencia que oprimen las diferentes zonas de nuestro país y que se extiende como un cáncer enfermando a nuestra gente, tales como son el narcotráfico, la corrupción, la impunidad, la mala política, la pobreza, el odio, la polarización, el egoísmo y otros más, exigen un compromiso mayor de cambio”.
El Secretario General de la Conferencia del Episcopado Mexicano afirmó que en el año 2023 hay muchas cosas por hacer para alcanzar la paz, cuyos esfuerzos pueden enfocarse en los Conversatorios y Foros por la Paz.
El llamado a la búsqueda de la Paz por parte de la Conferencia del Episcopado Mexicano se da luego de un año marcado por la violencia, que trastocó nuevamente a la religión luego del asesinato de dos padres jesuitas en la Sierra Tarahumara de Chihuahua en junio pasado.
Frente a esto la Iglesia de México lanzó las Jornadas de Oración por la Paz, la cual movilizó a docenas de sacerdotes y obispos del país que reflexionaron sobre la violencia que se vive en el país, todo ello, pese a las críticas del presidente Andrés Manuel López Obrador quien los tildó de “hipócritas”.
Uno de los obispos más críticos al respecto fue Miguel Ángel Alba Díaz, de la Diócesis de La Paz, Baja California, quien criticó que los gobernantes no ven al país “salpicado de sangre” y por los discursos en los que se dice “que todo va bien”.
“Nos acusan de no haber hablado, pero son ellos quienes no han escuchado”, dijo el obispo en su homilía a mediados de julio.
ES DE INTERÉS |
“Nos acusan de no haber hablado, pero son ellos quienes no han escuchado”
Denuncia obispo irrupción de sujetos armados en templo de La Paz, BCS
Iglesia ora por conversión de criminales; “autoridades han fallado”, afirman