Si bien la población mundial se ha multiplicado de manera exponencial en los últimos años, el ritmo de la natalidad se ha desacelerado, con lo que en muchos países, el número de hijos que tiene cada mujer no es suficiente para lograr un relevo generacional.
Ejemplo de esto son los datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que indican que mientras en el año 2000 se registraban 21.733 hijos nacidos vivos por cada mil personas, la cifra se redujo a los 17.464 durante el año pasado; una reducción de 4.269 en el lapso de 22 años.
De la misma manera, en el 2000 se estimaba que cada mujer en edad reproductiva tenía 2.7 hijos, mientras que para el 2021, el promedio fue de 2.3 hijos nacidos vivos.
Pero la planificación familiar no es igual en todo el mundo. Hong Kong, Corea del Sur y Palaos viven una crisis actual debido a sus bajas tasas de natalidad que amenazan con colapsar sus sociedades; problemas como la incompatibilidad de la vida profesional y personal, y las pocas facilidades para las tareas de cuidados han dejado a estas tres regiones con un estimado de 0.8 nacimientos por cada mujer en esas regiones, según datos del Banco Mundial.
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Y mientras que a nivel mundial, Puerto Rico ocupa el cuarto lugar de países con menor natalidad, en la región latinoamericana y del Caribe, ostenta el primer puesto, con la cifra de 0.9 hijos por cada mujer. Según datos del propio territorio, en 2021 se registraron únicamente 18 mil 439 nacimientos, la cifra de natalidad más baja en su historia, y entre sus principales causas se encuentra la migración de sus propios habitantes.
Más allá de Puerto Rico, otros países latinoamericanos se acercan a este panorama. Acorde a la ONU, 29 de los 50 países que conforman la región de América Latina y el Caribe presentan tasas de fecundidad inferiores a la media regional de 1.85 nacimientos por mujer, lo que augura que la población de adultos mayores seguirá aumentando.
En el caso de México, nuestro país ocupa el lugar 93 en la lista de países con menor cantidad de hijos por mujer al registrar un total de 1.8. Pero en la región latinoamericana ostenta el puesto 23, pues no alcanza siquiera 2, la cantidad que se requiere para mantener intacto el número de habitantes.
En este sentido, el Inegi ha alertado sobre la gradual disminución de población joven; entre 1970 y 2020, el porcentaje de personas de 0 a 14 años se redujo de 46 a 25 %, mientras que el de la población de 30 a 59 años aumentó de 22 a 38 %. Por su parte, el Consejo Nacional de Población (CONAPO) estimó que para 2050, el porcentaje de adultos mayores en el país será de 22 %.
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