Desde Tepoztlán, Morelos, el presidente Andrés Manuel López Obrador se pronunció de nuevo sobre el hackeo realizado a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) por Guacamaya.
Aseguró que el hackeo fue una “gran nota” pero solo sobre algo intrascendente: que se encontraba enfermo y que tenía “achaques”.
En su gira de este fin de semana por Guerrero, Puebla y Morelos pues aseguró que “todavía hay fuerza para seguir luchando”.
“Hace poco hackearon los archivos de la Secretaría de la Defensa y decían que venía un bombazo con toda la información y que se iba a caer el gobierno, ¿pues qué creen que fue lo más importante de toda esa información? ¿cuál fue el bombazo? Que estaba yo enfermo, pues claro que tengo achaques, ya estoy chocheando”, indicó.
Señaló que “esa fue la gran nota, porque en los informes de la Secretaría de la Defensa se da conocer que me intervinieron en el Hospital Militar; pero estoy bien, tengo que tomarme unas pastillas, un cóctel de pastillas, pero estoy bien, antier comencé una gira, fíjense porque fue un circuito”.
“Entonces enfermito, enfermito, pero todavía hay fuerza para seguir luchando”, declaró el mandatario.
El Presidente se encontraba en Tepoztlán donde inauguró la modernización de la carretera La Pera-Cuautla. Aprovechó para reiterar que cumpliría sus compromisos y agradeció al gobernador Cuauhtémoc Blanco.
El hackeo ha revelado no solo los “achaques” del mandatario, sino la forma de operar de la Sedena. Se han revelado extorsiones y abusos de la Guardia Nacional; así como complicidades de las Fuerzas Armadas con cárteles.
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