En el Zócalo de la Ciudad de México, el presidente Andrés Manuel López Obrador presentó 110 acciones y logros de su administración y la llamada Cuarta Transformación, a cuya base teórica e ideológica propuso llamarle “humanismo mexicano”; un modelo de gobierno que piensa dejar de legado.
Después de seis horas de la “Marcha del Pueblo” que partió del Ángel de la Independencia, el líder del Ejecutivo rindió su informe para celebrar el cuarto año de su gobierno en la Plaza de la Constitución, en dónde aseguró que se está haciendo historia, razón por la cual se tiene que tener “un distintivo”.
El humanismo mexicano propuesto por López Obrador, y caracterizado por principios políticos, económicos y sociales inspirados en personajes históricos como Miguel Hidalgo, Francisco I. Madero, Benito Juárez y Lázaro Cárdenas —mismos que suele retomar con frecuencia—, será definido “poco a poco” para heredar una “teoría propia” entre todos, aseguró.
Indicó que, aunque lo fundamental son los hechos, no deja de ser importante definir en el terreno teórico el gobierno que se está aplicando. “La política es entre otras cosas, pensamiento y acción”, puntualizó.
Detalló que en la Cuarta Transformación —y por ende con el humanismo mexicano— no se acepta el derrotismo pero sí se apuesta por las libertades y la democracia. Sostiene que el progreso sin justicia es retroceso, por lo que no importa solo lo económico, sino también lo social.
“El fin último de un Estado es crear las condiciones para que la gente pueda vivir feliz y libre de miserias y temores”.
Reivindicó una de las frases que lo ha acompañado durante su carrera política: “por el bien de todos, primero los pobres”. Así, el mandatario federal dijo que lo fundamental es desterrar la corrupción y los privilegios para destinar todo lo obtenido en beneficio del pueblo y, de manera específica, de “los más pobres y marginados”.
“Esta frase debiera ser la esencia de la actividad política, porque es sinónimo de humanismo y una forma distinta de entender la importancia del poder cuyo ejercicio”.
Reiteró que el ejercicio del poder “solo es virtuoso” cuando se pone al servicio de los demás, por lo que remarcó la importancia de actuar con amor al pueblo. "¿Quién defiende realmente a un gobierno democrático? El pueblo”, sostuvo.
López Obrador reunió a miles de personas de toda la República este domingo 27 de noviembre. Gobernadores y funcionarios locales, estatales y federales acompañaron al presidente, en lo que se estima acudieron cerca de 1.2 millones de personas.
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