WASHINGTON, EU.- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, presentó su estrategia de seguridad “American First”, en la cual asentó que una nación que no tiene fronteras no puede considerarse como tal, además de decir que una nación que no protege la prosperidad en el país no puede proteger sus intereses en el extranjero. En un discurso pronunciado en Washington, el presidente Donald Trump respondió a los desafíos en materia de seguridad que enfrenta el país, colocando el frente económico en el centro de su estrategia. Además advirtió que China y Rusia desafían el poder, la influencia y los intereses de Estados Unidos y están tratando de socavar la seguridad y la prosperidad de ese país. En un documento revelado por la Casa Blanca previo al evento, dice que los dos países “están decididos a hacer las economías menos libres y abiertas, a incrementar sus ejércitos y controlar la información para reprimir a sus sociedades y expandir su influencia”. Según el texto, China quiere expulsar a Estados Unidos de la región el Indo-Pacífico, mientras Rusia busca debilitar la influencia estadounidense en el mundo y crear divisiones con sus aliados y socios. El presidente estadounidense que, desde el clima hasta el libre comercio, ha marcado una neta ruptura con su predecesor Barack Obama y ha contribuido a aislar a Estados Unidos en la escena internacional, presenta este lunes su “estrategia de seguridad nacional”, un espeso documento que revisa los desafíos que enfrenta la nación. La convicción de la administración Trump, es que la competitividad económicas es un “tema de seguridad nacional”, donde existe la determinación de luchar por los intercambios equilibrados, en particular con China.
La mejor arma que tenemos es la fuerza de nuestro PIB”, añadió ese responsable, citando una frase del secretario estadounidense de Defensa, Jim Mattis.
El documento redactado por la administración Trump identifica cuatro prioridades vitales: proteger el territorio estadounidense, promover la prosperidad, preservar la paz gracias a la fuerza y hacer progresar la influencia de Estados Unidos. El clima no es prioritario Interrogado sobre el cambio climático en este documento-referencia, el ejecutivo estadounidense indicó que no lo consideraba una “amenaza a la seguridad nacional”. Llegado al poder con un mensaje decididamente climato-escéptico, Donald Trump anunció el retiro de Estados Unidos del acuerdo de París sobre el clima firmado por cerca de 200 países. Su predecesor Barack Obama, uno de los principales arquitectos de ese acuerdo, había señalado, sin embargo, que el desafió climático se había convertido en una cuestión de seguridad.