Al Presidente le cuesta dar un paso atrás
El presidente Andrés Manuel López Obrador demostró su preocupación, al no poder sacudirse del tema de la casa de su hijo mayor

Luego de defender por tercera ocasión consecutiva a su hijo José Ramón López en su conferencia matutina, el presidente Andrés Manuel López Obrador demostró su preocupación, al no poder sacudirse del tema, sostuvo Luis Estrada, director General de la empresa SPIN.
“La evidencia le demuestra al Presidente que no puede salir tan fácil del tema. Hoy en la sesión de Quién Es Quién no hablaron de esa nota, por supuesto. Si es falsa, se contesta rápido”, dijo el analista político.
Ante situaciones de crisis, el mandatario federal y los políticos de la Cuarta Transformación aplican el siguiente modus operandi: negar el hecho, minimizar, atacar a la fuente y victimizarse, describió Estrada. “Cuando tiene la evidencia en su contra, dar un paso atrás al Presidente le cuesta mucho trabajo”, describió.
“Es evidente que si el Presidente está enojado o cansado o desconcentrado, como en la conferencia en específico de hoy en la mañana, porque no está en su zona de confort”, apuntó.
“El presidente no puede lidiar con las crisis y, obviamente, los argumentos no los tiene porque no está acostumbrado a no tenerlos (los momentos de crisis)”, expuso. Esta actual crisis es similar al momento de tensión con la liberación de Ovidio Guzmán en 2019 y el accidente de la Línea 12 del Metro, que dejó 26 personas muertas.
De acuerdo con una investigación periodística, el hijo del mandatario federal y su esposa habitaron una casa valuada en 20 millones de pesos en Conroe, Texas, propiedad de la empresa petrolera Baker Hughes, que tiene contratos millonarios con Petróleos Mexicanos.
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