Agentes de la DEA y FBI filtraban información a cárteles mexicanos
Por tres años, la DEA, el FBI y la Oficina del Inspector General del Departamento de Seguridad Nacional permitieron que agentes estadounidenses facilitaran información sensible a cárteles mexicanos
Durante tres años, la Administración de Control de Drogas (DEA), el Buró Federal de Investigaciones (FBI) y la Oficina del Inspector General del Departamento de Seguridad Nacional permitieron que agentes estadounidenses facilitaran información sensible a cárteles mexicanos bajo el pretexto de seguir el rastro criminal.
Una investigación de Milenio reveló que en los hechos, los agentes involucrados fueron Juan Constanzo, un agente activo de la DEA, y Manuel Recio, un jubilado de la misma agencia.
Ambos fueron arrestados en mayo de 2022 y enfrentan múltiples cargos, incluyendo soborno.
Recio, tras retirarse de la DEA, fundó una empresa de consultoría llamada Global Legal Consulting; la cual ofrecía servicios de investigación privada a abogados defensores penales y supuestamente utilizaba información extraída por Constanzo de los sistemas de la DEA para alertar a sus clientes sobre investigaciones en curso en su contra, identidades de otros acusados y fechas de arresto.
La fuente de información utilizada por ambos era el Sistema de Información de Narcóticos y Drogas Peligrosas (NADDIS), una base de datos de la DEA que contiene información sobre personas bajo investigación.
Según el Departamento de Justicia de Estados Unidos, Recio le pagó a Constanzo por esta información.
Pagos a los agentes
Los pagos se llevaron a cabo a través de terceros y se utilizaron teléfonos especiales. Los montos oscilaron entre los 2.500 y los 70.000 dólares.
Durante la investigación, se interceptaron llamadas entre Constanzo, Recio y los criminales; revelando que entre los clientes de alto perfil se encontraban narcotraficantes mexicanos que eran objetivos prioritarios de la agencia antidrogas.
La defensa de Constanzo ha puesto en duda el alcance de la operación y ha cuestionado por qué se permitió que el exagente continuara extrayendo información durante casi tres años.
El Departamento de Justicia afirmó que las acciones entre Constanzo y Recio ocurrieron entre noviembre de 2018 y noviembre de 2019.
Sin embargo, la defensa argumenta que se le permitió continuar en activo hasta mayo de 2022. DJ
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