Son una clase de plantas utilizadas por su capacidad de equilibrar, restaurar y proteger el cuerpo como un todo. Estas se adaptan en función a las necesidades de tu cuerpo para obtener más resistencia al estrés, menos ansiedad, fatiga y mejor descanso. En gran medida mejoran la capacidad de tu cuerpo para adaptarse al estrés, no solo a aquel que puedes pasar en el tráfico o en el trabajo, sino al estrés interno al que se somete tu cuerpo para adaptarse a la temperatura (y no enfermarte cuando el clima cambia); entrenamientos (la capacidad de recuperación del músculo); luchar contra alguna enfermedad, lesiones o estrés crónico en el que los niveles de cortisol en la sangre son demasiado altos y afectan funciones de tu cuerpo. Para que una sustancia sea considerada adaptógena debe cumplir tres criterios:
- Inocuidad. ser tóxica ni presentar efectos secundarios relevantes, incluso al superar dosis habituales.
- Respuesta no específica en el organismo. Debe mejorar la tolerancia a cualquier tipo de estresor: físico, químico o biológico. Para el cuerpo, dormir poco o comer mal son también estresores.
- Efecto normalizador. Su acción debe adaptarse a la situación. Al reforzar el sistema regulador de la homeostasis, mejoran la respuesta en ambos sentidos, por ejemplo, si tienes problemas hormonales, ya sea altos o bajos, el adaptógeno se encargará de nivelarlos.
Uno de los más estudiados es la Rhodiola o raíz de oro. Esta planta ha sido utilizada desde hace cientos de años, te puede ayudar a reducir los efectos del estrés, la fatiga y hasta la depresión. La Ashwagandha es originaria de la India. Alivia la ansiedad, la depresión y el sueño; tiene efectos inmunomoduladores que potencian y regulan el sistema inmunológico, así como reducen los niveles de cortisol. También equilibra las hormonas tiroideas y es antiinflamatoria por lo que puede ayudarte en caso de tener artritis. Otro del que seguro has escuchado hablar, es el Ginseng, el cual es un clásico de la medicina Ayurveda. Se ha estudiado sobre todo como un tónico para reducir la fatiga, pero sus propiedades son múltiples: refuerzan el sistema inmune, previenen enfermedades respiratorias y mejoran la recuperación post entrenamiento, además, tiene propiedades anticancerígenas, cardioprotectoras y controla los niveles de azúcar en sangre. La Maca también es considerada como adaptógeno, originaria de los Andes, la cultivan en Perú. También mejora el rendimiento deportivo y disminuye los efectos de la menopausia como son la depresión, así como el sobrepeso. Por último, recuerda que nada funciona de manera milagrosa. Los adaptógenos son seguros, pero cualquier suplemento requiere cierta precaución. Si tomas medicamentos anticoagulantes o antidiabéticos, consulta a tu médico. Busca siempre productos de la mejor calidad si quieres notar resultados, con altas concentraciones, buenos procesos de elaboración y sobre todo, certificados.