Algunos lo aprecian como futurista, pero más pronto que tarde se tendrá que ver si el escenario fuera el de un triunfo de Claudia Sheinbaum, ¿quién habrá de encabezar la bancada del gobierno en el Senado?
¿Serán más los desafíos con perspectiva doméstica, para lo cual la responsabilidad recaería en Adán Augusto López o se enfocarán más a articular el entramado y la mirada a la realidad global, para lo cual tendría que recaer en Marcelo Ebrard?
Nos piden anotar desde ahora el pulso que viene y cómo se mueve cada uno para ser relevante. Porque no se debe dudar que ya tienen la mirada puesta en 2030.