En los últimos tres años, el gobierno mexicano se ha distanciado de los acuerdos internacionales para mitigar los efectos del cambio climático, al grado de llevar a cabo acciones que ponen en riesgo el desarrollo sustentable del país y el bienestar de la población, advirtió la organización Signos Vitales.
“México está incumpliendo los acuerdos internacionales firmados. Actualmente presenta un escenario poco favorable hacia el cumplimiento de los compromisos adquiridos, consecuencia de una política nacional de crecimiento económico incongruente e ineficiente con las tendencias ambientales internacionales y de desarrollo”, señala la organización en su más reciente reporte.
“El actuar político debe replantearse, estableciendo una política ambiental y de crecimiento diferente, eficiente y sustentable, que contribuya al cumplimiento de éstos, si se busca garantizar realmente el bienestar para la sociedad”, agrega.
De acuerdo con el documento, México ha suscrito al menos cuatro acuerdos internacionales que buscan reducir los contaminantes que provocan gases de efecto invernadero, causantes del calentamiento global.
Se trata del Protocolo de Montreal relativo a las Substancias Agotadoras de la Capa de Ozono (firmado en 1987), el Convenio Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (1992), el Protocolo de Kioto de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (1997) y el Acuerdo de París sobre Cambio Climático (2015).
Al referir que las emisiones de México de gases de efecto invernadero no sólo no han bajado, sino que crecieron en la última década, principalmente por la actividad de Petróleos Mexicanos y la Comisión Federal de Electricidad, el informe puntualiza que las decisiones de gobierno “pronostican un retroceso en los logros aún modestos en el proceso transitivo hacia energías limpias, y vulneran una serie de derechos humanos que a futuro traerá consecuencias que se traducirán en altos costos que la sociedad tendrá que pagar”.
Sobre el gasto total programado en el Presupuesto de Egresos de la Federación de los últimos años, Signos Vitales destaca que el desproporcionado gasto destinado a las empresas productivas del Estado (Pemex y CFE) ha mantenido un incremento sostenido, alcanzando 1 billón 258 mil 420 millones de pesos al 2022, representando el 18% del Gasto Neto Total durante el periodo 2019–2022.
En cambio, los recursos para la adaptación y mitigación de los efectos del cambio climático, si bien presentaban una tendencia al alza en 2021, para 2022 presentó un recorte de 3 mil 732.1 millones de pesos.
Al destacar las consecuencias de seguir con la política actual, el reporte advierte que los costos acumulados del cambio climático para México durante este siglo serían comparables a perder hasta dos veces el PIB de México de 2010. De igual forma, en el sector agricultura los costos serían comparables a perder el valor de dos años de la producción agrícola en México.
SIGUE LEYENDO:
John Kerry sostendrá reunión con AMLO la próxima semana