El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, fue abucheado por los aficionados que asistieron al quinto partido de la Serie Mundial entre los Astros de Houston y los Nationals de Washington.
Mientras la imagen del republicano era transmitida en la pantalla gigante del National Park, casa de los Nationals, los aficionados respondieron con abucheos, mientras que un sector de sus partidarios respondió con el grito de “lock him up”, que los simpatizantes del también empresario adoptaron para apoyarlo y a la vez desacreditar a Hillary Clinton, su rival en las pasadas elecciones presidenciales.
Trump no lanzó la primera bola en el juego, la cual es una tradición que todos los Presidentes de los Estados Unidos han realizado desde 1910. Según el Comisionado Rob Manfred, el mandatario no quiso lanzar la bola “para que la experiencia de los fanáticos sea lo más positiva posible”.
