En un histriónico alegato final, la defensa del Chapo Guzmán pidió el jueves al jurado que no le crea a testigos cooperantes criminales que son “una basura” y han mentido bajo juramento, en tanto aseguró que el verdadero jefe del cartel de Sinaloa es el Mayo Zambada y el acusado apenas un chivo expiatorio. Los 14 exsocios del capo mexicano Joaquín Chapo Guzmán que testificaron en su contra, la mayoría para obtener una sentencia reducida, “no solo admitieron haber mentido cada día de su vida, su miserable y egoísta vida, sino que les han mentido a ustedes en la corte”, dijo el abogado Jeffrey Lichtman al jurado en la corte federal de Brooklyn. Ismael Mayo Zambada, cofundador del cartel de Sinaloa “es la verdadera pieza que falta en este lugar”, afirmó. “El Mayo es hace décadas el mayor narcotraficante de México y nunca ha sido arrestado”, dijo Lichtman. Aseguró que nunca fue el Chapo quien pagó un soborno de 100 millones de dólares al expresidente mexicano Enrique Peña Nieto, como dijo el exnarco colombiano Alex Cifuentes, exmano derecha del capo, sino Mayo. No tiene sentido que el Chapo haya pagado una coima tan enorme “para luego ser cazado como un animal” por las autoridades, mientras Mayo, que tiene 70 años y nunca pasó un día en la cárcel, “toma sol en las montañas” y “está libre como un pájaro”, indicó Lichtman, un experimentado abogado que ganó fama cuando salvó de la cárcel al hijo de un afamado capo de la mafia neoyorquina, John Gotti Jr. “Mayo Zambada hizo ese pago” de 100 millones de dólares a Peña Nieto y es el que se ha beneficiado más del mismo, aseveró. El expresidente mexicano niega tajantemente haber sido sobornado por el cartel de Sinaloa. Lichtman se enfocó especialmente en las supuestas mentiras de los hermanos narcos colombianos Alex y Jorge Cifuentes, grandes proveedores de cocaína del Chapo. "¿Comprarían ustedes un coche de los Cifuentes? ¿Dejarían que los Cifuentes cuidaran a su hijo? ¡Por supuesto que no! El coche se les rompería al salir del estacionamiento. Su niño sería vendido por un kilo de cocaína. ¿Pero van a depositar toda su confianza en estos hombres para condenar al señor Guzmán?”, preguntó. “Si no creen en los testigos cooperantes, no pueden condenar al señor Guzmán”, insistió. “Esto no es hacer justicia. Es solo sobre una cosa: atrapar al Chapo. ¡Solo atrapar al Chapo!”. El Chapo, de 61 años, es acusado de haber traficado cientos de toneladas de drogas a Estados Unidos a lo largo de 25 años. Si es hallado culpable, podría pasar el resto de su vida tras las rejas. El jurado comenzará a deliberar el lunes próximo.