Con la finalización de las fiestas navideñas, también se reanudaron las protestas en Perú a cargo de opositores al gobierno de la recién nombrada presidenta Dina Boluarte, que exigen su renuncia, la convocatoria de una asamblea constituyente y el adelanto de las elecciones generales para este año.
Fue la compañía Aeropuertos Andinos de Perú quien informó de los disturbios de esta jornada a través de un comunicado: “Nuestro aeropuerto Inca Manco Cápac de Juliaca ha suspendido sus operaciones desde hoy, 6 de enero en la tarde, ante los actos de violencia suscitados y la falta de seguridad en sus inmediaciones que ponen en riesgo la seguridad de nuestro equipo y pasajeros”, antes de asegurar que ya se encuentran realizando acciones conjuntas con las autoridades, aerolíneas y la comunidad aeroportuaria para reanudar las actividades aéreas con seguridad.
Versiones apuntan a que los inconformes trataron de entrar al aeropuerto, y se enfrentaron con las autoridades, quemando algunas patrullas.
Momentos más tarde, las protestas se extendieron a Cusco, Puno, Madre de Dios (sureste) Ica (suroeste), Apurímac (centro sur), Moquegua, Tacna (sur), Huánuco, Junín (centro) y Cajamarca (norte). Se trata de sectores donde Castillo, un maestro rural, tiene apoyo.
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En respuesta, la presidenta aseguró que “respetamos el derecho a la protesta pacífica de la población, pero el mensaje de la mayoría es que no queremos que nuestro país siga en la inestabilidad (...) queremos vivir en paz”.
Asimismo, convocó la próxima semana al “Acuerdo Nacional”, un foro que reúne a los poderes del Estado, sociedad civil, agrupaciones religiosas, gremios empresariales y trabajadores. “Abordaremos los temas urgentes para lograr la paz social”, dijo a medios.
Este viernes, Boluarte cumplió su primer mes en la presidencia después de la destitución de su predecesor, Pedro Castillo, y en este tiempo se contabilizan al menos 22 muertos. En un intento por amainar la crisis, el Parlamento aprobó el adelanto de elecciones de 2026 para abril de 2024, pero no ha sido suficiente y se esperan nuevas movilizaciones en contra de la presidenta.
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