Las más de 30 millones de dosis anti-Covid aplicadas desde el 24 de diciembre del año pasado no han logrado un impacto sustancial en la letalidad por Covid-19 en México, que se mantiene en los niveles reportados previo al arranque del Plan Nacional de Vacunación en diciembre del año pasado.
Hoy este indicador, que muestra el número de personas que han perdido la vida por coronavirus entre cada 100 pacientes positivos, se mantiene en 9.28%, una cifra que incluso es 0.02 puntos mayor que la registrada en diciembre del año pasado cuando aún no se contaba con vacunas anti-Covid para toda la población.
Una revisión elaborada por ejecentral con datos de la Dirección General de Epidemiología (DGE) detectó que la reducción más importante en la letalidad a nivel nacional corresponde con la aprobación de pruebas masivas en la Ciudad de México, algo que expertos en salud pública califican como el camino adecuado para medir el impacto real de la pandemia en el país.
En este mismo cruce de datos se pudo comprobar que 17 estados del país registran una letalidad mayor a la del promedio nacional, que se mantiene especialmente bajo por los altos reportes de casos leves en la Ciudad de México gracias a la aplicación de pruebas masivas de detección, lo que ayuda a diluir este indicador entre 3 y 4 puntos.
Baja California es la entidad con mayor desfase de la curva nacional al reportar 17 defunciones por cada 100 casos positivos, una cifra que casi duplica el promedio nacional de fallecimientos. Hidalgo, Veracruz y Sinaloa se encuentran en una posición similar con una tasa de letalidad que ronda los 15 puntos porcentuales.
Por otro lado, los estados con menor letalidad que la registrada a nivel nacional se caracterizan por aplicar más pruebas de detección a Covid-19 entre sus habitantes, o bien por tener un aumento sustancial en el número de casos positivos reportados durante las últimas semanas.
Tal es el caso de Baja California Sur, entidad que a pesar de encontrarse en el mayor rebrote de casos de Covid-19 desde que inició la pandemia, se encuentra al fondo de la tabla de letalidad con una tasa de 3.92 defunciones por cada 100 enfermos positivos.
Especialistas en vigilancia epidemiológica advierten que el dinamismo de la letalidad puede ser engañoso en situaciones como las de Baja California Sur, en donde el retraso natural entre casos y defunciones puede dar un escenario engañoso respecto a la situación de riesgo.
Andreu Comas, virólogo y epidemiólogo de la Universidad de San Luis Potosí, señaló que, a diferencia del 9% que se presumió como un logro esta mañana, la letalidad global es del 2.1%, mientras que la estimación real se acerca al 1%, cifras que posicionan nuevamente a México como uno de los países más letales por Covid-19 a nivel mundial.